Capítulo 10

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Querido diario... ¡JAJ! ese saludo no me lo creo ni yo.

Estoy en una casa en un pueblo con la familia de mi madre, llegué el sábado y me iré el lunes (que es festivo, no hay que ir a la escuela).

 Aunque estoy TOTALMENTE  incomunicada no estoy aburrida, hay una piscina (aunque un poco pequeña y peligrosa por que la piedra del piso tiene puntas afiladas, tengo los pies vueltos nada) y nado en ella, también hay una baraja de cartas con las cuales hago torres... ah, y mis primas Saori y Haruki, tienen 11 y 12 años respectivamente. También vino uno de mis primos (no es Hiroshi) con sus amigos (no sé la edad, deben estar al rededor de los 16 años). 

Extraño la ciudad, estos días me he dado cuenta de que no sirvo para vivir en pueblo, no sirvo para dormir temprano, mucho menos para levantarme temprano, no sirvo para hacer fogatas, no sirvo para ordeñar vacas, no sirvo para nada de eso. Extraño la estufa, el ordenador, extraño el tener que ir a la tienda por leche y huevos. Por que aunque sea una casa con piscina, la vida pueblerina sigue igual.

No hablo con Shiro desde el viernes, extraño hablar con él y que se sonroje por algo que digo... o que él dice, también. Él es muy agradable, los ratos con él se pasan rapidísimo. Ojalá estuviera aquí, quiero hablar con alguien, mis primas están dormidas.

*La madre de Misaki toca la puerta de la habitación, Misaki se levanta y abre*

- ¡Mamá! ¿Que pasa?

- Estuve afuera un rato, conseguí señal en el teléfono. Era para ver si querías llamar a tu padre, a tus amigas o a alguien. Hazlo rápido, se hace tarde.

Tomé el móvil de mi madre, salí al balcón y cuando encontré señal una pregunta se me vino a la mente: ¿A quién llamaré?. Quiero llamar a Shiro, pero creo que mi madre tiene por seguro de que llamaré a papá y me preguntará que me dijo... ¡ya sé! Llamaré a Shiro primero, cuando cuelgue borraré la llamada del historial y luego llamaré a papá.

*Misaki marca el número de Shiro, el timbre de espera comienza a sonar mientras ella se asegura de que no hay nadie cerca escuchando*

- ¿Hola? - contesta Shiro

- Hola Shiro, ¿sabes con quién hablas?-

-Con... ¡¿Misaki?!

- Sí, ¿como estás?

- Muy bien, ¿y tú? ¿que cuentas? ¿que haces llamándome a esta hora?

- No exageres, son las 10:00 pm. No está tan tarde. Te cuento que estoy en un pueblo y que te llamo por que... pues... por que sí.

- ¿Por que sí? ¿no será que me extrañabas?- dijo Shiro, bromeando.

- Bueno... no sé... tal vez... sí.

- Y-yo también te extraño... bueno, ¿y en qué pueblo estás?

- En Takayama.

- Woah, eso es lejos.

-Ya lo sé, extraño la ciudad. Oye Shiro, no puedo demorarme mucho. ¿Que cuentas?

- Nada, pensándote mucho, pensando en lo del viernes.

- ¿El... viernes? ¿qué pasó el viernes?

Tengo muy buena memoria para la escuela, pero para lo otro... no mucha, ni siquiera recuerdo que fue lo que desayuné.

- ¿No lo recuerdas?- noté que Shiro se puso un poco triste por esto, sin embargo, recordé inmediatamente a Yukiji y lo que dije.

- Ah, lo de Yukiji ¿verdad? ¿por qué estás pensando en eso?- dije, esperando que él no recordara lo que dije... aunque sabía que lo recordaba.

El Diario de una KuudereDonde viven las historias. Descúbrelo ahora