Día del secuestro...
*______ Pov*
Desperté algo aturdida. Mis parpados pesaban y apenas podía abrir los ojos.
No sé qué sucedió. Me sentía muy débil y la cabeza me dolía de una manera horrible.
-Ya puedes irte -dijo una voz masculina.
A lo lejos podía oír a alguien.
-Está bien. Sólo... no hagas estupideces, ¿Quieres? -Esa voz... de pronto todos los recuerdos volvieron a mi mente haciendo que mi cabeza quisiera explotar.
Recuerdo que estaba en el aeropuerto... estaba hablando con Loren... el rubio... un auto... brazos... pañuelo...
Entonces caí en la cuenta.
-Me... me secuestraron -Murmuré. Intento mover las manos pero no puedo, y fue entonces que me percaté de que estaban amarradas.
¡¿Pero qué demonios?!
Sentía algo blando bajo mis glúteos, seguramente un colchón.
-¡¿Qué es esto?! -echo un vistazo a toda la habitación en la que estoy. Es un desastre. Las paredes están manchadas con algo negro, los muebles son viejos y desgastados, además hay un par de herramientas tiradas en el suelo.- Díos mío...
Escuché pasos acercándose a donde estaba. Mi corazón comienza a alterarse y las manos me sudan al mismo tiempo que tiemblan. Estaba en pánico.
¿Qué va a pasar conmigo?
-Despertaste... -una suave pero a la vez fría voz habló. No pude distinguir su rostro por la poca luz que había en la habitación hasta que se acercó más hacia mí.- ¿Cómo te sientes? -se trataba de un chico no muy alto, de cabello castaño alborotado con un flequillo cubriendo gran parte de su ojo derecho y sus ojos... sus ojos eran azules claros. Vestía una camiseta sin mangas negra y un jean del mismo color.
-¿Quién... quién eres? -pregunto en un hilo de voz.
-¿No te acuerdas de mí? -sonríe irónicamente.
¿Acaso me conocía? ¡¿Quién es este hombre?!
- No me sorprende... -continúa.- Ya ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos -se encoge de hombros al mismo tiempo que saca un cigarro de su bolsillo trasero y lo enciende.
¡¿Última vez que nos vimos?!
¡¿Quién demonios es este tipo?! ¿Yo lo conocía? ¿Qué quiere de mí? ¡¿Por qué me secuestró?!
Miles de preguntas sin respuestas rondaban en mi cabeza, parecía haber perdido la capacidad de hablar y pensar porque sólo me limitaba a mirarlo. No podía soltar ni una sola palabra por el miedo que tenía. Él soltó humo por la boca y sonrió de una manera fría.
-Louis Tomlinson... -Empecé a buscar en mi memoria alguna clase de recuerdo. Ese nombre me parecía familiar, pero no podía recordar a ningún conocido que se llamara así.
A lo lejos escucho el timbre de un celular, y al prestar atención a la melodía distingo que se trata del mío. Él sale de la habitación y luego de unos minutos vuelve con mi celular en manos.
-Es tu padre -murmura con la vista en la pantalla.- ha llamado más de tres veces ya -parecía haberse irritado.- Solo dile que estás bien y que te quedarás más tiempo en New York. -Estira el celular en mi dirección.
-¡¿Qué?! -él se mantiene serio haciéndome ver que no estaba bromeando, pero pesar de aparentar estar tranquilo podía notar una pisca de miedo en sus ojos.
¿Qué pretendía hacer conmigo ahora? ¿Qué quiere de mí?
- ¡¿Por qué le diría eso?! ¡¿Qué quieres?! ¡¿Por qué haces esto?!- le gritaba inclinandome hacía él cada vez más con cada palabra que decía. Mi cabeza estaba echa un completo desastre en éste momento. A esta altura me encontraba llorando, y es que por más que quisiera mostrarme valiente... no podía. No ahora.
-Tú sólo haz lo que te digo. -tiró el celular justo en mis piernas.
-¡No! -le grito- ¿Quieres dinero? ¡¿Eso es lo que quieres?! ¡Mi familia tiene dinero! Te darán lo que pidas, solo... déjame ir... -murmuré las últimas palabras con algo de suplica.
-No necesito tu dinero -parecía haberse ofendido. Díos mío, ¡Éste tipo es un loco!
-¡¿Entonces qué demonios quieres?! -grité con más fuerza. El celular deja de sonar nuevamente.
-Te quiero a tí...
Gracias a todas las que me amenazaron de muerte si no subía :)
Las amo chicas♡
PD: Este capítulo lo hizo mi amiga Eve Horan :3 yo solo lo modifiqué un poco.
Síganla por fa: LittleHoran18
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Stockhoml Syndrome (L. T y Tú)《EDITANDO》
Romance《Síndrome de Estocolmo》 ¿Quién no ha hecho locuras por amor? Exacto. Nadie, y Louis no sería la excepción.