Capitulo 2

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Sigo sentada frente a mi escritorio situado junto a la ventana. Mi mirada esta perdida en algún punto del cielo observando como el sol se esconde por completo. Estoy sumergida en mis pensamientos de los cuales la mayoría tienen que ver con cierto chico de cabellos rosáceos. Desde hace unos pocos días que descubrí lo que en realidad sentía por Natsu. Ese chico revoltoso que siempre está tan lleno de energía y me brinda las sonrisas más lindas que jamás había visto. Estando con él es imposible que alguien se aburra. Una suave brisa mueve mis cabellos rubios y acaricia mi rostro. Cierro los ojos ante el contacto sonriendo, concentrándome en la sensación tan relajante. Abrí mis ojos con un sonoro suspiro. Muy bien, ya lo había decidido y no había vuelta atrás. Cerré mi diario parándome.
-Le diré a Natsu que lo amo.- Murmuré para mí misma
-¿Cuando?- Preguntó una voz a mis espaldas.
-Esta noche, durante la fiesta de aniversario del gremio.
Un momento, ¿No se suponía que estaba sola? Al darme cuenta de esto mi cuerpo se tensó y mis ojos se abrieron con temor. Ahora alguien sabía de mi secreto. Lentamente giré mi cabeza para descubrir al intruso.
-¡¿Gray?- Grité sorprendida- ¿Cuántas veces les he dicho que no entren en mi apartamento sin mi permiso?
-Así que te gusta Natsu- Dijo pensativo ignorando mi pregunta.
Al instante mi humor pasó de enojo a vergüenza. Un intenso rubor cubrió mi rostro mientras desviaba la mirada. En ese momento la alfombra de mi habitación me parecía muy interesante.
-Entonces te deseo suerte con tu confesión.- dijo colocando su mano en mi hombro como una señal de apoyo.
Subí la vista algo asombrada mirándolo directamente a los ojos, buscando algún indicio de burla. Sin embargo, lo único que encontré fue total sinceridad haciéndome sentir más relajada. Le sonreí como muestra de agradecimiento y él me devolvió el gesto.
-¡Oye Lucy ya empezó la...!
Al escuchar tan repentino grito no pude evitar saltar por el susto y al parecer tampoco Gray. En ese momento nos percatamos de lo cerca que estábamos por lo que nos alejamos rápidamente algo avergonzados. Ambos posamos la vista en el recién llegado. Mi corazón se aceleró al reconocer esos ojos almendra que nos miraban de una forma extraña. Estaba como paralizado y por un momento me pareció que sus manos se convirtieron en puños y en su mirada destelló algo parecido al odio. Pero seguramente eran imaginaciones mías. ¿Qué razón tendría Natsu para comportase de esa forma?

Por siempre contigo... (Fairy Tail)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora