El lunes, Colin llegó al set con Josh y Ginny, y en cuanto se bajó del coche, empezó a buscar a Jen. Aunque había pasado un fin de semana agradable con la pareja, a pesar de las circunstancias y de echar muchísimo de menos a su hijo, pues los días libres eran cuando más podía disfrutar de él, no había podido dejar de pensar en el momento de volver a verla y explicárselo todo. Sabía que estaría enfadada, pero confiaba en poder arreglar las cosas. De repente, un cartel blanco en la entrada llamó su atención.
"ATENCIÓN: Debido a la ausencia de Jennifer Morrison hasta el miércoles, el orden de grabación de las escenas ha sufrido algunas modificaciones. Por favor, acudid a la sala de edición para ver la nueva organización. Gracias".
Debía de haber un error. ¿Cómo que Jen no volvía hasta el miércoles? Camino a la sala de edición, se encontró con Adam.
- ¡Adam! - le paró.
- ¡Hola, Colin! ¿Qué tal el fin de semana? - le preguntó el creador, con una sonrisa.
- Muy bien. - dijo sin más. No quería ser cortante, pero necesitaba ir al grano. - Oye, ¿qué es eso del cambio en la grabación de escenas?
- Ah, sí. Jen me llamó el sábado a última hora de la tarde para pedirme un par de días libres por motivos personales. Le dijimos que no había problema, así que se incorporará el miércoles por la tarde. Lo único es que hemos tenido que retrasar sus escenas y poner algunas antes para rellenar los huecos. En la sala de edición tienes el listado.
- Ya... gracias, Adam.
Se despidió de él y empezó a andar como un autómata hacia la sala. En realidad, no le importaba nada el nuevo orden de rodaje. Sólo pensaba en que Jen seguía en Los Ángeles. Llamó a Adam el sábado por la tarde... probablemente, después de escuchar su mensaje. Sintió como si le hubieran dado una patada en el estómago. ¿Así estaban las cosas? ¿Tan odiosa le resultaba la idea de encontrarse con él como para pedirse unos días libres? No había otra explicación. Cómo era la vida... hace sólo unos días, dudaba entre dos mujeres que tenían sentimientos por él, y ahora, ninguna de las dos quería volver a verle.
Durante el descanso para comer del miércoles, apareció Jen. Respiró hondo al llegar al rodaje. Tras unos días geniales en Los Ángeles con su familia y sus amigos, tocaba volver. Adam y Eddy habían sido muy amables al concederle esos dos días, pero no podía seguir retrasando lo inevitable. Sin embargo, su actitud respecto al viernes había cambiado: volvía con energías renovadas, sabiendo que tenía a su lado a mucha gente que la quería y que, pese a todo, la vida sigue. Tras saludar a un par de compañeros y recoger su vestuario para hoy, se metió en su caravana. Dejó el móvil y el bolso encima de una pequeña mesa de escritorio, el vestido en una silla, y empezó a desnudarse. Cuando ya tenía la blusa en la mano, quedando desnuda de cintura para arriba salvo por el sujetador, notó que la puerta se abría y que Colin, que la había visto llegar, aparecía tras ella.
- ¡Wow! Lo siento. - exclamó, dándose la vuelta hasta quedar de espaldas a ella. "Bonito encaje", pensó.
- ¡Colin! ¡Maldita sea! ¿Por qué no llamas a la puerta? - protestó Jen, volviendo a ponerse la blusa a toda prisa.
- Porque nunca he llamado. - y era verdad. Su nivel de confianza era tal que siempre entraban y salían de la caravana del otro como de la suya propia. Era un milagro que nunca antes se hubieran encontrado con una situación así.
- Pues a partir de ahora, hazlo. - respondió Jen, incómoda. - Ya puedes girarte.
Colin se dio la vuelta y se quedaron mirando. El incidente del sujetador había ayudado a romper un poco el hielo, pero ahora iban a tener que hablar de verdad. Colin empezó.
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Amar nunca es un error
RomanceJennifer Morrison y Colin O'Donoghue. El destino cruzó sus caminos, y pronto se dieron cuenta de que no podían vivir el uno sin el otro. Pero el amor nunca es fácil... Historia para Colifer shippers. Espero que os guste, :)