la clase de matemática se me hacía más larga a medida que los minutos pasaban, mis manos sudaban y mis pies se movían de arriba a abajo con mucha velocidad. sería una completa mentira decir que no estaba nerviosa, estaba nerviosísima.
el autobús que la institución había solicitado para el dichoso paseo llegaba a las 8:30, faltaban solamente 30 minutos.
no estaba segura de como haríamos para que el plan funcionara, sentía que todo iba a terminar siendo un desastre.
la noche anterior logre conciliar el sueño a las dos de la mañana porque la preocupación y los nervios no me permitían cerrar los ojos. como pude realice los ejercicios que el profesor había colocado, estaba concentrada en todo menos en los ejercicios que estaban anotados en mi cuaderno.
después de 10 minutos, la puerta se abrió revelando la figura de la señorita Murphy.
"perdone la interrupción, profesor Henderson, pero el trasporte para los muchachos acaba de llegar" anunció mientras se acomodaba un flequillo que reposaba en su frente.
"terminen las ecuaciones, el viernes las estaré revisando." dijo el profesor mientras recogía sus cosas del escritorio.
nos levantamos de nuestros asientos y caminos al estacionamiento, un pequeño autobús estaba justo en frente de nosotros con las puertas abiertas.
a medida que íbamos subiendo la profesora nos quitaba la autorización firmada por nuestros padres, si no la tenías, debías quedarte en el instituto. subí los pequeños escalones y me senté en unos de los últimos asientos junto con vanessa, el bolso que llevaba tenía varias botellas de agua, un paquete de papas fritas (ruffles/flays) galletas oreos y algunos caramelos, pesaba un poco ya que también llevaba zapatos y ropa extra, trate de acomodarlo muy bien para que no se viera demasiado apretado y me lo revisarán o algo así.
supuestamente alguno de nosotros iba a fingir que debía ir urgentemente al baño cuando estuviéramos cerca del centro de la ciudad, no quise saber nada más porque estaba segura que en cualquier momento podía revelar esa información y estropear todo.
el chofer, un señor alto y con canas, prendió la radio y comenzó a conducir. dos voces masculinas se filtraron por las bocinas y segundos después una canción las sustituyo. la canción me resultaba extrañamente conocida pero no me propuse a recordar el nombre, recosté mi cabeza en el asiento y cerré los ojos.
pude sentir como alguien se levantaba y arrastraba los pies por el pasillo, quería abrir los ojos para ver que estaba sucediendo pero el cansancio me lo impedía.
"¡tengo muchas ganas de vomitar!" chilló una voz de mujer para luego empezar a soltar pequeños quejidos. las palabras mencionadas hicieron que abriera mis ojos de inmediato.
diane estaba de pie al lado del asiento de la profesora, agarrando su estómago de forma exagerada. no me sorprendió el hecho de que fuera ella la persona que debía fingir estar enferma, era la reina del drama.
"¿no puedes esperar algunos minutos?" pregunto la profesora con una mueca en su rostro.
"no, me siento fatal" respondió la muchacha, segundos después se llevo una mano a la boca.
"por qué no nos detenemos en la estación de servicio?" intervino una voz masculina, jackson sandler.
"segura que no puede esperar, señorita adams?"
"completamente segura, no creo que pueda aguantar un minuto más." respondió la castaña.
el autobús cruzó a la izquierda, entrando así a la estación de servicio, diane salió disparada a los baños mientras que la profesora trataba de seguirle el paso. el chofer aprovechó la ocasión y entro al pequeño cafetin que estaba a pocos metros, desde la ventana podía verlo ordenando un cupcake y un café, eso era definitivamente beneficioso para nosotros. solamente faltaba deshacernos de la irritante profesora.
minutos más tarde, diane subió apresuradamente al autobús, y antes de que murphy tuviera tiempo de decir algo, la castaña estampó un billete de 10 dólares en la palma de la mujer con mal sentido de la moda.
"podría comprarme un chicle de menta y una botella de agua? tengo un sensación amarga en mi boca."
la señorita murphy acomodó su flequillo por décima segunda vez en el día, y bajó del autobús.
vi como la figura entraba al cafetin y buscaba las cosas que diane había indicado, antes de que pudiera darme cuenta, christian walker se cambió de asiento y gritó:
"¡esa es nuestra señal!" las puertas del pequeño autobús se cerraron y vehículo comenzó a moverse. justo cuando cruzábamos para salir de la estación, vi como el chofer comenzó a correr.
"rápido, christian! ya se dieron cuenta, acelera esta cosa" gritó escandalosamente vanessa.
a medida que los segundos pasaban, veía más lejos y más pequeñas las figuras de los adultos encargados de nuestro cuidado. solté un gran suspiro y una risa tonta se escapó de mis labios. quizás era una muy mala decisión, quizás estaríamos en problemas, pero, de eso se trata no? de vivir el momento.
y eso era lo que tenía planeado hacer.
iba a olvidarme de todo y de todos, pensaba disfrutar mi día en la playa al máximo.
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antes de que me maten, lean, disfruten, voten y comenten ahre
chaOo
