One More Time (Bryan Mouque)

20.

Son exactamente las 9 am cuando toco el timbre de la casa de Aria, escucho el sonido que viene desde adentro anunciando mi llegada.

La puerta se abre.- ¡Bryan!- me saluda su madre.

- Buenos días, señora.

- ¿Cómo estás?.

- Muy bien, gracias y ¿usted?.

- De maravilla. Pasa por favor, Aria bajará en un momento.- abre un poco más la puerta y entro- ¿Quieres un poco de agua?- me pregunta después de cerrar la puerta.

- No, muchas gracias.- camino hacia la sala de estar.

- No hay de qué. Iré a ver si Aria ya está lista, siéntate por favor, bajo en un momento.

- Gracias.- respondo y me siento en el sillón individual que está a mi izquierda. Pierdo de vista a su madre cuando sube las escaleras.

Mientras espero mi teléfono vibra en mi bolsillo, lo saco y reviso el mensaje que me acaba de llegar:

"Ya los estamos esperando. Atte: Jos"

- ¡Hola, amor!- me saluda Aria. Levanto mi vista hacía ella, está usando unos jeans grises con una playera negra holgada sin mangas y sus botas negras, se ve hermosa.

- Hola, cariño.- le respondo. Bloqueo mi teléfono y lo guardo en mi bolsillo cuando me levanto.

Camino hasta ella y sin pensarlo más la beso.- ¿Nos vamos?- le pregunto una vez que nos separamos.

- Sí, vámonos.- toma de mi mano y me guía hasta la puerta de su casa, toma sus llaves que están colgadas al lado de la puerta y abre ésta para salir.

La sigo hasta la salida, cerramos la puerta con llave y juntos caminamos hasta mí coche, le abro la puerta del copiloto y la ayudo a subir, una vez que está adentro camino hasta el otro lado del coche y entro en él.

- ¿Estás lista para lo que te tenemos preparado hoy?- le pregunto mientras enciendo el coche.

- ¡Claro que sí! Desde anoche estoy lista, éste día será el mejor.- sonríe.

- Es tu día.- le sonrío. Acerco mi mano a ella buscando la suya, cuando la encuentro la tomo y entre lazo sus dedos con los míos.

Todo el camino fuimos de la mano, conversando de mil cosas y a la vez de nada, diciendo tonterías, recordando historias, riendo y disfrutando el momento.

- ¿Aquí está bien?

- Sí.- me responde.- Está muy cerca.

Término de estacionar el auto y una vez que acabo lo apago y retiro las llaves.- Vamos.- me giro hacia ella, estaba mirándome con una sonrisa.- ¿Qué?- le pregunto confundido.

- Nada en especial- sonríe un poco más-, es sólo que eres perfecto.- se acerca lentamente a mi quedando frente a frente y susurra- Te amo...

- Te amo más...- susurro y poco a poco nos acercamos terminando en un beso.

Nos besamos por un buen rato, incluso llegue a olvidar qué era lo que estábamos haciendo ahí. Me perdí en ella, en el momento y en la magia que generabamos cuando estábamos juntos, en esa conversación que acaba de empezar, en sus historias, en las bromas que le hago, en su ceño fruncido cuando no le gusta lo que le digo, en su manera de abrir tan grandes los ojos cuando va a decir otro de sus descubrimientos, cuando sonríe, ríe o me besa cuando le hablo, cuando ella es la única que habla y yo me entretengo escuchándola con atención; era irremplazable, de esas veces en las que quieres que un momento dure para siempre aunque sea imposible hacerlo, en especial por que ella se iría y sólo tenía éste día para disfrutar de su compañía y en pocas palabras, de todo de ella.

Ella habla entre besos, me da un beso de pico y se aleja para continuar con su conversación que apareció de la nada. Se ve tan linda cada vez que sigue hablando de lo que leyó hace unos días sobre el Área 51 y cuando de repente recuerda algo más sobre las cosas sobrenaturales que le gustan o cuando le pregunto cualquier cosa y hace esa mirada seria antes de responder algo que tiene tanto sentido que no me quedan más preguntas; y para ser sincero es sorprendente que le apasionen todas esas cosas, que me cuente cada detalle y que recuerde cada historia, cada noticia o artículo que lee sobre el tema.

Nuevamente se aleja de mis labios para hablar- Debería de trabajar en la Nasa.- dice seria y segura.

- Deberías.- le respondo y me besa.

- Lo sé, sería mi trabajo perfecto.- se queda pensando unos minutos, mira fijamente la radio sin prestarme atención.

- ¿Qué debes estudiar para entrar ahí?- me mira.

- No lo sé.- niega con la cabeza.- ¿Me ayudas a investigar en la tarde?

- No tienes que preguntármelo.

Sonríe y se acerca hasta mí para besarme por enésima vez.- Te amo.- dice sobre mis labios.

- Te amo más.- respondo de la misma forma y la vuelvo a besar.

Mi teléfono comienza a sonar, Aria y yo nos separamos, saco el pequeño aparato de mi bolsillo y veo la pantalla.- Es Jos.- le digo a Aria y asiente.- ¿Bueno?- contesto.

- ¿Bryan? ¿Dónde están?- suena enojado.

- Estamos cerca, ocurrió un inconveniente pero ya vamos para allá.- miro a Aria, está sonriendo como siempre.

- Es muy tarde, apúrense.

- Ya vamos, bye.- le cuelgo.

-¿Todo bien?- me pregunta la hermosa chica que tengo sentada a mi lado derecho.

- Sí, todo bien, sólo falta inventar una mentira por si preguntan.

- Digamos que me sentí mal antes de salir de casa.

- No lo creerán.- digo obvio.

- A mi sí me creerán.- sonríe maliciosamente.

- Creo que ya entendí.

- Bueno, vamos.- antes de que pueda decir algo sale del coche.