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Estábamos en el comedor, Paul estaba sumergido en sus pensamientos mientras negaba con la cabeza, Ringo no comía, John tarareaba una canción y George reía mientras comía... Y no entiendo por que.

Su aspecto de los cuatro era horrible, se veía que no habían comido mucho; estaban muy flacos, tenían ojeras, el pelo despeinado y descuidado, estaban pálidos y se veía que no dormían bien. Sobretodo Ringo, tenía golpes, rasguños y cortadas por todos lados.

-¿con quien hablabas ayer John?- le pregunte rompiendo el silencio y pude ver como John dejaba caer su cuchara

-hablaba con mi madre- dijo un poco ¿enojado? Su expresión era un poco...rara

-y...¿dónde esta?- al decir eso John empezó a apretar su puño, los demás se veían preocupados

-¿qué no la ves?- dijo enojado-esta aquí- dijo señalando a la nada, En verdad estaba asustada... No había nadie, pude ver a George parándose junto a John intentando tranquilizarlo

-John, ahí no hay nadie- al decir eso John grito, empujo a George y se abalanzó hacia mi haciéndome caer, empezó a golpearme y a rasguñar mi rostro y el empezó a llorar

-ella está viva,viva,viva...VIVA- dijo agarrandome del cuello intentando estrangularme...el me iba a matar-yo...no mate a mi padre, no...yo no lo mate jaja yo no- me dijo cargándome con su mano en mi cuello, yo pude presenciar mi muerte

-John suéltala- dijo Paul y John lo volteo a ver y me soltó, haciendo que cayera al suelo recuperando el aliento

-yo..no lo mate- decía John sin parar-ella está viva, ella esta viva, ella esta viva ¿verdad? ¿Verdad que si madre? Jajaja si, yo no lo mate- decía John sentándose

-Ringo ayúdame a llevar a John a su habitación- dijo Paul agarrando a John del brazo y Ringo del otro

-ella está viva ¿verdad que si Ringo?- dijo John a Ringo

-claro que si- dijo Ringo- pero vamos a dormir, te es cansado- y cerraron la puerta y yo me quede con George...sola, a estas alturas, quería regresar a casa

-¿estas bien?- dijo George acercándose a mi pero yo me aleje-tranquila, no te haré daño- dijo acercándose a mi y cerré mis ojos... El agarro mi rostro- te dejo heridas muy profundas, déjame ir por el botiquín- y se fue a la cocina y yo permanecí en silencio, toqué mi rostro y tenía sangre, mire mi rostro en el espejo y me veía entre pálida y morada

-siéntate- dijo George y agarro un mechón de pelo y lo puse detrás de mi oreja, puso alcohol en algodón y lo puso en mi rostro haciendo que chillara de dolor, puso algunas vendas y me dio un vaso de agua, hubo un momento en que pude sentir mi respiración muy cerca de la suya -no le hables a John sobre su madre ¿quieres?- dijo George alejándose de mi y yo me quede ahí sola, dudando sobre mi vida

CRACKERBOX PALACEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora