XXVI

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No hay luz sin obscuridad...

¿Habrá Ángeles sin Demonios?

-¡RINGO!- grite mientras veía el cuchillo encajado en el suelo de madera rozando su oreja que sangraba. Paul agarraba a John quien estaba llorando con la quijada y los puños cerrados mientras Ringo lloraba y temblorosamente se paraba mirándome con suplica mientras yo me limitaba a abrazar a George quien temblaba

-Agradécele a McCartney, Starkey.- dijo  John sin voltear a verlo mientras Ringo le daba la espalda -tal vez a la próxima no me controle y nadie mas lo hará.- al decir eso Ringo se fue a su habitación. Le di un beso en la coronilla a George y fui a la habitación de Ringo

P.O.V John

-AHHHHHHHHHHH.- mis chidillos de dolor retumbaban por toda mi cabeza. Sentí mis manos temblar mientras veía el cuchillo clavado en el suelo y lentamente me acostaba en el

-¿John?- me llamo McCartney con preocupación

-¿sabes algo? Los únicos chidillos que no recuerdo son los de mi madre.- dije de la nada acariciando el cuchillo con algo de sangre de Richard. Vi como George quien estaba en una de las esquinas de la habitación miraba a Paul con preocupación por mi comentario -No temas George, todo estará bien.- dije sonriendo mientras metía una gota de sangre a mi boca

p.o.v Eleanor

-¡RINGO ÁBREME!-  dije tocando la puerta como loca

-Vete Rigby.- dijo Ringo con un nudo en su voz

-Vine a curar tu oreja.- dije con el botiquín en mis manos mientras lentamente Ringo abría su puerta dejando ver su hermoso ojo azul verificando que en verdad tuviera ese botiquín

-Pasa.- se limito a decir mientras entraba a su habitación; nunca le había prestado atención, era algo grande y un poco antigua, tenía algunos cuchillos sobre la mesa pero mi vista se fue hasta una foto de John donde estaba vestido como Teddy Boy y tenía una hermosa sonrisa

-¿venias a curarme o a ver a John?- dijo Ringo de la nada un poco molesto

-Lo siento Ringo.- dije carraspeando -siéntate- al decir eso el se sentó en la esquina de su cama y yo sacaba el alcohol y un algodón -va doler un poco.- dije rompiendo el silencio

-¿dolor?- dijo el bufando -mejor dime algo que no conozca- al decir eso puse el algodón en su oreja

-La felicidad.- dije sin mas y el se me quedo mirando con sus hermoso ojos azules

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Hola! Pues gracias por comentar, gustar y leer mi novela en serio muchas gracias . El otro asunto que quería decirles es:

¡UNA PORTADA! Ggg

Quien me pueda hacer una portada de este libro se lo agradecería mucho mucho

Los amo bai

CRACKERBOX PALACEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora