Capitulo 8:

640 40 2
                                    

Maratón 2/5.

Salimos de la universidad con dirección al auto de Andrew, mi acompañante de esta tarde.

Cruzo por mi mente una pregunta, "¿Como pagare el tatuaje?". Tenía la esperanza de que aceptarán tarjetas de debito, si era así podría pagar hasta lo que sólo aparecía en mis sueños.

-Oye Andrew -paramos frente a un Mustang 90's -¿Aceptan tarjetas en ese lugar? -se recargó sexymente frente a la puerta del copiloto.

-Si el dinero es el problema no creo que...

-No! Ese no es el problema -no deje que terminara -A lo que me refiero es que sólo traigo tarjeta de debito, si en tal casi no la aceptarán debo de ir al cajero.

-Si, aceptan tarjetas -abrió la puerta -¿Podemos irnos ya?

Veinte minutos después estábamos en el centro, pasamos varios semáforos y llegamos a un centro comercial, yo esperaba que el lugar estuviera en un barrio o incluso fuera independiente, jamás que fuera en un centro comercial.

-¿Es aquí? -pregunte mientras él se estacionaba.

-Esta adentro, ¿acaso te ha dado miedo?

-Por supuesto que no! Vamos. -la verdad era otra, si estaba algo asustada, no sabía si el lugar era de fiar, si ya eran expertos en esto o no, si tenían las medidas de limpieza requeridas y tampoco sabía sí fiarme de Andrew, hasta ese momento me estaba preguntando por que había aceptado venir con él.

Entramos al centro comercial, como cualquier otro estaba repleto de gente. Minutos después nos acercábamos a un establecimiento con un letrero en letras extrañas "SkullKid", todo el local era blanco, al menos por fuera, sus ventanas eran más bien espejos, no se veía hacia dentro.

Me atreví a voltear a ver a Andrew, si, estaba asustada, ¿acaso dolería?, Sujete con poca fuerza su brazo antes de entrar, de limito a sonreír discretamente, tomo mi mano y entramos los dos juntos.
Por dentro era totalmente diferente a como me imaginaba, al igual que por fuera, todo era blanco, ahora podía observar que había afuera de las ventanas, al parecer eran diferente a un cristal normal.

-Buenas tardes, ¿que se les ofrece? -un hombre alto, fornido y con barba de color castaño claro se nos acercó.

-Buenas tardes, mi amiga quiere un tatuaje -me empujo hacia enfrente.

-Buenas tardes -salude.

-¿Hicieron cita?

-No... es mi primera vez -sonreí tímidamente.

-Ya veo, esta bien, pero hay un costo extra dependiendo del diseño de tu tatuaje y se le agregará un extra por ser sin cita.

-Si, no hay problema.

-Bien, pasa por aquí -señalo hacia una cortina de color hueso que estaba al fondo -¿Vas a querer que tu novio te vea?

-Él no es mi novio -me sonroje pero Andrew sonrió pícaramente -Sólo somos conocidos.

Mofo el señor.

-¿Conocidos y te trae a hacerte un tatuaje? Vaya que han cambiado lo términos al pasar de los años -maldije en mis adentros mientras pasábamos al cuarto.

To ahí era tan... higiénico, todo estaba en su lugar y en las paredes estaban varios diseños de tatuajes, todos en marcos de color negro. Esto parecía más un consultorio.

-Pasa y recuesta te en aquella silla mientras voy por los materiales.

Una vez recostada Andrew se sentó a mi lado, lucía más emocionado que yo, el señor se nos acercó con una máquina y algunas cosas más, se incluía un IPad.

SecretDonde viven las historias. Descúbrelo ahora