-¿Nathaniel? -Murmuré esperando que me contestara y de repente escuché como una puerta se cerraba de golpe.
-Creo que está despertando... -Era la voz lejana de Paul, me dolía todo el cuerpo y no recordaba exactamente qué había pasado.
Abrí los ojos lentamente, me dolía incluso mover los parpados.
-¿En dónde estoy? -Murmuré cerrando nuevamente los ojos.
-Oh, mi niña -la voz preocupada de mi madre se escuchó en toda la habitación.
Maldición lo que menos quería era que mis padres se enteraran de que me había ido.
-Mamá, lo siento.
-Oh, Azul eso es lo de menos ahorita. -Se inclinó sobre la camilla envolviendome en un protector abrazo.
-Cabe decir que eso no te librará de un castigo. -Agregó mi papá.
-De verdad lo lamento.
-Bueno... señor y señora Evans. Los dejaré solos.
-Paul.
-¿Si? -Su mirada se iluminó.
-¿Dónde está Roy?
El brillo en su rostro desapareció tan rápido como llegó.
-Salió de la habitación en cuanto despertaste -suspiró encogiéndose de hombros- tal vez hubiera sido mejor que dijeras su nombre en lugar del de tu ex.
¿Qué?
Paul salió de la habitación dejando a mis padres tan desconcertados como yo.
-Azul... ¿por qué te fuiste? Debiste pedir permiso ¿Y si te pasaba algo peor? ¿Y si no nos enterabamos? -Mi mamá sonaba tan preocupada.
-Lo sé mamá... lo siento.
Dió un leve asentimiento con la cabeza y se abrazó al brazo de mi padre recargandose en su hombro, suspire tratando de ponerme cómoda y la puerta se abrió dejando ver a un chico vestido de blanco, asomó la cabeza algo dudoso y mostró una sonrisa apenada.
-Lo siento... ¿es la habitación de, Azul Evans? -Preguntó con un tono de suplica, parecía que llevaba horas buscando la habitación.
-Así es. -Confirmó mi padre.
Entró en la habitación dando un pequeño salto y sonrió con alivio.
-Estupendo, llevo buscando la habitación durante diez minutos, lo lamento, soy nuevo y me perdí... -Dejó escapar una pequeña risita, tan dulce que contagió a mi madre- soy Logan y... bueno, se supone que seré tu enfermero durante el tiempo que estés aquí, que tengo entendido no será mucho.
-Me pacere bien. -Dijo mi padre y tomó a mamá por los hombros- esperaremos afuera. -Me lanzó una mirada de desaprobación y salió con mi madre por delante.
Suspiré y me hundí todo lo que pude en la cama.
-Hola, Azul.
-Hola...
-¿Cómo te sientes?
-Me duele todo el cuerpo...
Apreté los ojos mordiéndome las mejillas por dentro, me sentía adolorida, sentía como si hubiera hecho ejercicio sin parar el día anterior.
-Bueno.., debido a lo que te pasó es lógico que todo te duela. -Se encogió de hombros sonriendo y apunto un par de cosas en una tabla- ¿18 años?
Asentí.
-¡Vaya! Muy joven como para escapar de casa.
-No me escapé de casa. -Hice una mueca y fruncí el ceño.
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Camino hacia el corazón de Azul ©
Romance"Camino hacia el corazón de Azul" Sinopsis Azul Evans, es una chica como cualquier otra, buenas notas en la escuela, con amigos y amigas, y una familia que la adora, solo hay una cosa que la inquieta desde hace ya algún tiempo... Una noche de su pas...