Maibell Handson Sowyer

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Al día siguiente todo seguía siendo una completa mierda. Más claro el agua. Levantarme temprano para ver como se burlaban de mí, y para oir los gritos de los profesores no era algo que fuese divertido. Ni siquiera quiero levantarme, no sé porque lo sigo haciendo. Antes me apasionaba ir a estudiar, ahora ni siquiera me gusta.
Que se burlen de mi lo acepto, pero que también rian porque no tengo padres me duele... Este día me quedará marcado...este día... lo recordaré hasta mi misma muerte.

Me levanté por la mañana normal como siempre hago.

Me lavé la cara, cepillé los dientes, me peiné, cogí el desayuno, coloqué la mochila y por último me vestí.

Me conecté al WhatsApp y ví que tenía uno de Jonan:

[24/03/15, 06:34]

Jonan: Hola, sé que ya perdí nuestra apuesta pero tenía que hablarte... mí madre dice que hoy vengas a comer a casa.√√

[24/03/15, 6:40]

Yo: No sé Jonan, no quiero estorbar. Pero por haber perdido la apuesta me debes un helado.√

Para cuando me dí cuenta por estar entretenida ya eran las 7 tenía que correr o se me escaparía la guagua.

Bajé por las escaleras lo más rápido que pude, por lo cual gracias a las prisas casi me caigo.

Abrí la puerta del edificio y me encontré de sorpresa a Jonan.

-¿Jonan? ¿Qué haces aquí?-Pregunté como si no lo supiera-.

-Pues esperarte, hoy no vas en guagua, que ya que quedamos cerca del instituto deberíamos ir caminando ¿No?-Me guiñó un ojo-.

-Ems, pero... ¿No llegaremos tarde?

-Si seguimos de cháchara claramente llegaremos tarde.

Me cogió de la mano y empezó a correr. Mí mochila iba dando botes en mi espalda y veía como a Jonan se le movía el pelo al correr contra viento. Me hacía gracia que alguien que no me conociese de nada fuera tan 'bueno' conmigo.

De repente, paró en seco.

-¿Qué te pasa? Estás como en las nubes.-Dijo serio-.

-N-Nada, es sólo que estoy acostumbrada a ir en guagua y el camino se me hace largo...-Contesté, aunque la verdad es que estaba atenta mirando como me cogía de la mano, recordé cuando mi padre me llevaba así al parque cuando niña-.

-¿Quieres que te lleve a caballito?

-¿¡Qué?! Claro que no, se andar solita

-Pues correr se te da de culo.-Me hizo una pedorreta en la cara-.

-¡JONAN! ¡ERES IDIOTA!-La verdad que sí, me cabreé-.

Me di cuenta de que nos habiamos parado, y Jonan me miraba con cara seria y ojos tristes. No sé porque, pero... en un gesto rápido le abrazé y seguí caminando. Él, solo se dedicó a seguirme.

Escuché como alguien le llamaba en la lejanía.

-Jonan, ¡Mira detrás!

-¿Qué?

Él se giró y allí estaba, Merche.

-Pensé que no te alcanzaría nunca.

-Pensé que había logrado escapar de ti.

-¿Qué?

-Nada, hehehe.-Se rascó la nuca mientras reía-.

-¿Podemos seguir? Llegaremos tarde.-Dije-.