Te encontré y conocí el amor

Tadashi

Narra Hiro
-Hiro- Escucho una voz familiar, una voz que hace mucho no escuchaba, una voz que extrañaba con el alma y que necesitaba escucharla, me voltee -¡Estás aquí- dije feliz, emocionado y con una gran sonrisa dibujada en mi rostro, había regresado, por fin estaba de nuevo conmigo, después de 5 largos años Tadashi había regresado.

Hiro: ¡Dashi volviste! -corrí y lo abracé-

Tadashi: Por fin estoy aquí estoy campeón, no sabes cuanto te he extrañado -me contesta el abrazo-

Hiro: -No puedo detener mis lágrimas, he pasado días y noches enteros pensando en el, en cuando volvería- No te vuelvas a ir por favor

Tadashi: Ya no me iré pequeño o más bien grandote, mira como creciste y que guapo te pusiste -me dijo mientras me acariciaba el cabello-

Hiro: -Me separé de el y le di un beso en la mejilla- Gracias, pero tu eres más guapo Dashi -le sonreí sonrojado-

Tadashi: Después de tanto tiempo me sigues diciendo Dashi -se ríe-

Hiro: ¿Te molesta? Es que desde pequeño te llamo así, per.... -no pude terminar de hablar ya que me interrumpió-

Tadashi: De ninguna manera, me gusta que me digas así, te oyes muy lindo cuando me dices Dashi -me sonrió-

Hiro: -Entre el mareo gracias a las copas que traigo encima y las mariposas que me hacen sentir las palabras que me dice Tadashi no puedo mantener el equilibrio y caigo, pero el me sostiene del brazo evitando mi caída- Gracias Dashi

Tadashi: Hiro ¿tomaste? -pregunta algo molesto-

Hiro: Si -miro al suelo apenado-

Tadashi: ¿Desde cuando bebes? -su tono molesto seguía pero ahora parecía preocupado-

Hiro: Ya tengo 16 Tadashi, ya no soy el niño inocente de 11 años que era -conteste algo molesto, era por el alcohol-

Tadashi: ¿Como que ya no eres inocente? ¿A que te refieres? -su tono paso de molesto a preocupado-

Hiro: He hecho cosas con personas y... -mire sus ojos preocupados y me callé, el alcohol estaba haciendo que le dijera toda la verdad, no quiero que el se entere que me he acostado con varios hombres, eso solo lo hacia porque me sentía solo, quería olvidarlo, pero nunca pude- nada, nada, olvídalo, estoy ebrio y no sé lo que digo

Tadashi: Los niños y los borrachos siempre dicen la verdad, dime que cosas has hecho -su tono parecía el de un padre decepcionado de su hijo-

Hiro: Ya te he dicho que nada, estoy borracho -me voltee y me dirigí a las escaleras, subí unos cuantos escalones pero me caí, estoy demasiado mareado-

Tadashi: ¡Hiro! -gritó asustado ante mi caída- ¿Estas bien?

Hiro: Bien mareado -me reí-

Tadashi: Eso veo -me levanto y me cargo, subió las escaleras y se dirigió a mi cuarto, abrió la puerta y prendió la luz, me acostó en la cama y me empezó a desvestir-

Hiro: Yo puedo solo -dije sonrojado y quitando sus manos-

Tadashi: ¿Qué? ¿Acaso no recuerdas que yo te ponía tu pijama? -dice sonriendo y siguió desvistiéndome-

Hiro: Gracias por ayudarme

Tadashi: No es nada pequeño -se levanto y fue por la pijama que en si era un short negro y una playera roja, tomo la ropa y me la puso- Descansa Hiro -me da un beso en la frente y se dirige a la puerta-

Hiro: -me senté en la cama- Tadashi, Dashi -corregí- Podrías dormir conmigo -agache la cabeza para que el no viera mi cara toda roja-

Tadashi: Creo que tienes razón -rió-