¿Jugamos?

¿Otra vez?

 Viernes en la noche, Zayn y Niall habían llegado media hora temprano -Igual que todos los demás- para hacerles una broma a Harry y Louis, quienes eran los únicos desinformados acerca del cambio horario, por lo tanto, fueron los últimos en llegar. 

-¿Qué es esto?-Pregunta Harry.-¿Otra vez ya están todos aquí?-El rizado parecía indignado.-Estoy seguro de que no llego tarde esta vez.

-De hecho, no eres el último, Hazz.-La puerta vuelve a abrirse y entra Louis.

-Oh, carajo, no pueden hacer esto. ¿Otra vez?-Cuestiona molesto.

-¿Qué pasa?-Indaga Louis, y al ver indignado rostro de su amigo lo entiende. 

-¡Estoy bastante seguro de que llegue temprano!-

-¿Son los últimos, Taylor?-Preguntó Niall con una sonrisa, la rubia miró la sala.

-Los últimos.-Declaró, molesta. No le hacía gracia que su galán estuviera  a los besos con un hombre en sus narices, se sentía estúpida. Louis tomó asiento en el suelo, esperando secretamente ansioso por el nuevo reto. Harry estaba incomodo, miró la puerta varías veces, si se iba ya no podría volver, y allí la pasaba genial. Allí no había padre, profesores o tareas, allí eran ellos relajándose. No más. 

-Bueno, el desafío para los que llegan tarde tiene que empezar. 

-Yo tengo una idea.-Dijo Sophia alzando las manos.-

-Bien, habla.

-Que se quede uno en una habitación y otro en la otra, solo con un teléfono cada uno. Deben llamarse y excitarse mutuamente, y él que gima primero o se cambie de habitación será el perdedor.-

-Pueden evitar eso, quiero decir, no vamos a enterarnos si no lo hacen.-Sophia sonrío.

-Van a hacerlo. Sabremos si no.-"Van a hacerlo porque quieren hacerlo" quiso agregar, pero se calló por respeto a los muchachos. Harry tomó su teléfono y fue al cuarto de Zayn, sin preguntar nada. Era un lugar oscuro y ordenado, casi familiar, había estado allí innumerables veces. Louis, en cambio, se dirigió al cuarto de la hermana de su amigo. El celular de Harry sonó en su mano, y este se apresuró a responder.

-¿Harry?

-Umh

-No debemos hacerlo, no lo sabrán si...

 -¿Sabes, Lou?-Dijo juguetón.-Tengo mi mano en mi polla justo ahora, y estoy pensando en ti.-

-Harry...-Dijo sorprendido el otro, y se descubrió a sí mismo llevando su mano a su miembro, en un acto casi inconsciente. 

-¿No quieres sentirme dentro tuyo, Louis? ¿No quieres probarme?-El otro se mantuvo en silencio.-Estoy tocándome por ti, bebé... Y se siente tan rico... 

-Hazz.-Casi gimió el otro.-

-¿Estás tocandote?

-S-sí. 

-¿Con ropa?

-No.

-¿Te has quitado todo?

-El... pantalón y los boxers.-Dijo con la voz baja y excitada.

-Tócate, y piensa que soy yo quien te toca.-Harry gruñó y comenzó a mover su mano más rápido y fuerte.-Dios, Louis, quiero que vengas aquí.

-Harry...

-Quiero follar tu lindo culo.

-Ha...-

-Dios, Louis.-Al oírlo decir su nombre con su voz ronca y tensa, Louis no pudo evitar sentir una sensación extrema de placer en todo su cuerpo.

-Voy a correr...-Antes de completar la frase ya tenía la mano llena de un liquido blanquecino, similar al que Harry había dejado en la cama de su amigo.

-Espero que esto se repita alguna vez.-Susurro el rizado.-Ahora ve, y muestrales que eres heterosexual