27~ Cosquilleos y susurros.

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"Si ha ido tan bien vuestra cita, ¿por qué no le has dicho que subiera?"- Pregunta Ari mientras saco una cerveza de la nevera.

"Tenía que irse."- Me encojo de hombros.-"De todos modos le veo esta noche cuando vaya a trabajar."

"¿Y qué harás con Henry? Hoy hemos estado con él."

"¿Y eso?"

"Hemos ido a cenar a su apartamento y... Creo que deberíais hablar."- Suspira.-"Está bastante emocionado pensando que le estás dando una oportunidad."

"¿Por qué mierda piensa eso? Al ver a Luke hoy también me lo ha dicho y en ningún momento acepté volver a intentarlo con Henry."- Bufo y abro el botellín.

"Sea el motivo que sea lo piensa."

"Bueno, no creo que Luke tarde mucho en hablar con él para decirle que me ha visto con Harry hoy en el cine."

"¿No te preocupa que pueda decírselo?"- Pregunta y niego con la cabeza.

"Es hora de que empiece a asumir que no siempre va a conseguir todo lo que quiere."

Hablamos un rato más en la cocina mientras me termino la cerveza y Ari come cualquier tipo de dulce posible que encuentra entre los cajones y poco después salgo de allí para ir a mi habitación no sin antes pasar por delante de la de Jake, en la que aún no se encontraba y tardo poco en cambiarme de ropa y quedarme dormida en cuanto toco la cama.

(...)

Despierto con el sonido de mi móvil y enseguida apago la alarma, maldiciendo todo como cada noche, aunque salgo de la cama con una pequeña sonrisa que se forma en mi cara una vez recuerdo que en apenas un rato vería a Harry de nuevo. Me doy una pequeña ducha y me visto antes de dirigirme a la cocina a prepararme un café, viendo la puerta de Jake entreabierta y él tumbado de mala forma con boca abierta y el pelo totalmente revuelto. Como siempre.

Apenas me queda tiempo y decido llevarme el café en un termo para ir bebiéndolo mientras iba en el coche y salgo rápido de allí y unos cuantos minutos después, me encuentro frente a la pastelería que como de costumbre ya tiene luz en su interior, ya que Harry solía venir siempre un poco antes que yo.

"Hola."- Me hago notar y dejo mis cosas tras los mostradores antes de entrar en la cocina.

Harry está cogiendo algunas cajas de uno de los estantes más altos mientras se estira tanto que su camiseta deja ver una parte de su torso y un par de sus tatuajes en su cadera. Los músculos de sus brazos quedan marcados en cuanto coge el peso de las cajas y comienza a bajarlas. Se coloca la ropa y rasca la nariz antes de girarse y darse cuenta de mi presencia allí.

"Hola."- Sonríe y le devuelvo la sonrisa.-"No te he escuchado entrar."

"He llegado hace apenas un minuto, no te preocupes."

"Y estaba deseando que lo hicieras."- Muerde su labio y se acerca a mí para pasar sus manos por detrás de mi espalda y juntar sus labios con los míos.

"Bueno, por desgracia tenemos que trabajar ahora mismo."- Susurro y beso su mejilla antes de separarme de él mientras intenta fingir que llora.

"Lo bueno es que sólo hay que hacer el pan y algunas tartas, así que si nos damos prisa luego podemos aprovechar un poco el tiempo que nos sobre."- Guiña un ojo y le dedico una sonrisa.

Nos ponemos manos a la obra y empezamos a realizar una gran cantidad de masa de distintos tipos para darles forma en decenas de barras que poco a poco comienzan a llenar los estantes para pasar poco después a hacer lo mismo solo que con algo más de tranquilidad ya que los pasteles debían ser hechos con trabajo individual para conseguir los distintos sabores y poder decorarlos perfectamente, unos con dibujos de flores, otros con crema de colores, otros con algún tipo de gelatina... Llevaban su tiempo pero valía la pena.

Something hidden behind the scarsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora