DIFFERENT LOVES (#Wattys2015 )

22. MI DECISIÓN

Congelada me dejaron esas palabras, la tierra dejo de dar vueltas el silencio y la mirada absorta de NOÉ admirándome y esperando una respuesta hicieron que me levantara del sofá agitadamente.

-¡Yo! ¡Yo!-Titubee -nada más salía de mi boca aunque yo quisiera, mientras su rostro era todo un dilema de duda, mi comportamiento estaba causando un interrogante en su entrecejo el cual estaba totalmente arrugado, creo que estaba sorprendido, hasta yo misma lo estaba de ver mi reacción tan exaltada.

Fue como si me acabaran de dar una bofetada enorme, mi corazón empezó a latir con fuerza, los nervios se apoderaron de toda mi sangre, si se pudiera medir la adrenalina creo que la mía estaba totalmente revolucionada y claro en estos momentos es cuando mis neuronas se detienen y son mis impulsos los que actúan. El viaje maravilloso, dulce, cremoso y delicioso como el chocolate se estaba convirtiendo en la acidez del limón como decía mi madre, las ansias por quedarme se habían convertido en prisas por irme para dormir y olvidar esta desilusión.

-¡Carlota! Relájate tenemos diez días por delante –Dijo NOÉ

La angustia, el miedo y ahora también el enfado me acorralaron ¿Diez días? ¿Ese es el futuro que nos queda? Como asimilar que o me marcho a Alemania o solo unos días es lo que me queda junto a él.

-¡NO, no, no puedo imaginar mi vida sin NOÉ! Me aterroriza la idea, él me sacó de mi oscuridad, devolvió el despertar de mi mustia vida, fue mi hombro en mi momentos débiles, fue mi abrigo en mi frío, la calma de mi sed, el sol en los días nublados, la estrella de mi noche, es el que roba mi aliento, es mi ilusión ¡Y ahora todo se lo llevará el viento!

No sé si como una cobarde pero la única salida en este momento era la puerta que estaba en frente mío, mi cabeza era un tifón, necesitaba aire, necesitaba que no se fuera, necesitaba que todo se quedara igual que estaba, necesitaba respuestas y no tantas preguntas por lo que abrí y salí huyendo sin mirar atrás.

-¡Cálmate, cálmate! Pedía la voz de mi conciencia a gritos y revoloteando por todas las paredes de mi carcasa cerebral, mientras mis piernas se movían a velocidad del rayo y la arena salpicaba mi piel, llegue hasta la orilla de la playa, espirando e inspirando alborotadamente, me senté derrotada por mi nerviosismo, las gotas de sudor se unían con mis lágrimas las cuales resbalaban por mis piernas, encerré tanto mi cabeza en ellas que casi la aplasto quede hecha un ovillo, el niño que llevamos en nuestro interior tenía una gran pataleta solo el adulto podía actuar y poner orden, pero éste parece ser que había desaparecido en este instante, cuando pude alcé mi mirada al mar esperando que él me diera respuestas, pero cada vez que el agua retrocedía más preguntas traían las olas.

Lo primero que me vino a mi mente fue mi madre, le hice la promesa que estudiaría lo hemos conseguido pero ¿Cómo retribuiría yo a mi madre si me fuera? ¿La decepcionaría? ¿Me convertiría en lo que ella siempre odio? Una mujer florero ¿Dónde quedaría todo mi camino duro de esfuerzo, de constancia de años de estudio? ¿Dónde quedarían todos mis logros? ¿Deben de quedar en un cubo de basura por amor? ¿Y mis hermanos? ¿Podría soportar estar lejos de ellos? ¿Qué seria yo en Alemania? ¿Un ama de casa? Tendría todo limpio, limpísimo, mientras él trabaja, después ¿Seriamos unos locos enamorados, jugaríamos a los amantes? ¿Y? ¿Me recompensaría todo y me haría sentirme completa? ¿Y, si no me voy? ¿Se olvidará nuestro amor? ¿Y si él no acepta por mí? ¿Perderá la oportunidad de su vida? ¿Qué será de su futuro?

¡NO, no, no puedo! ¿Por qué tiene que ser todo tan difícil en este mundo? ¿Por qué, por qué? Una respiración profunda mezclada con soponcio vino a mis pulmones, entretanto reconozco esa dulce olor de su fragancia dejando que sus brazos rodeen mi cuerpo sin pensarlo me doy la vuelta necesito tanto su protección en este instante y que calme mi angustia como el respirar, pasados unos minutos nuestras miradas se encuentran como pidiendo explicaciones, la tristeza inunda mi interior al ver los ojos hinchados de NOÉ.