My Fake Boyfriend | Mario Götze

6.- Las dos somos opuestas

      -Estamos al aire libre-señalo todo a mi alrededor-¿Por qué necesitamos vestirnos así?

Ser la ayudante de la asistonta es lo peor que me puede estar pasando. Después de que ella me metiera en un vestido crema de manga corta y con largo hasta un poco más arriba de la rodilla, junto a unos tacones negros; tuve que transcribir algunos documentos en la computadora. Mis deditos me duelen de tanto escribir.

El entrenador junto a los chicos, ya regresaron de su paseo en bicicleta y ahora se encuentran entrenando arduamente. Todas las miradas se ponen hacia el próximo partido contra Portugal.

Menuda suerte que tenemos.

-Si vas a trabajar conmigo, debes ser elegante-sonríe de lado mientras me extiende una hoja-Dale esto a Joachim para que lo firme, ¿quieres?

Agarro la hoja, la observo y luego dirijo mi mirada hacia Joachim.

-Pero él está en el campo.

Me encuentro en suelo firme pero Joachim está en el pasto, puedo caerme en estos tacos. No es seguro.

-¿Y qué tiene? Necesito esa hoja firmada ahora.

Pongo los ojos en blanco pero luego sacudo ligeramente la cabeza y comienzo a caminar hacia el campo.

Cuando llego al borde, justo al inicio de la tierra prometida...me quedo quieta y observo el grass. Decido agacharme y...

-Ni se te ocurra quitarte los tacones. Eso sería de muy mal gusto y, sobre todo, elegancia-Esta maldita p...-Cosa que no tienes-añade en voz baja pero audible para mí.

¡Maldita! Descubrió mis intenciones. Me levanto y respiro hondo antes de seguir caminando, con sumo cuidado y equilibrio. Cuando estoy a medio camino me doy cuenta que falta un lapicero para que firme, así que me doy la vuelta y me encuentro con la maldita asistonta jugando con el lapicero entre sus manos.

Cuando llego hasta ella, le quito bruscamente el lapicero y regreso al camino. La muy perra sonreía burlonamente.

Siento la mirada de distintas personas, debe ser porque estoy caminando un poco raro.

Al fin llego hasta el entrenador y le entrego el documento. Lo saludo y él a mí con una sonrisa.

-¿Qué tal va todo con Allison?-pregunta mientras firma.

-Excelente-alzo las cejas y sonrío falsamente. Últimamente, actuar se me hace mucho más natural.

-Me alegra-Luce satisfecho. Creo que su intención fue darme un trabajo fácil junto a Allison pero es lo contrario.

Me devuelve el documento y continúa dirigiendo a sus jugadores.

Volteo para regresar hacia la asistonta, quien me mira desafiante. Intento caminar lo más equilibradamente posible pero tampoco quiero parecer tiesa.

De pronto siento que el tacón se dobla debido a un mal paso y caigo de bruces pero mis reflejos hacen que levante el documento para que no se manche y, al menos, logré eso.

Una mano se extiende frente a mí y la tomo para levantarme.

Intento limpiar mis rodillas rápidamente mientras alzo la vista-Gracias Ma...-Llegué a pensar que era Mario pero me equivoqué-Gracias, Erick.

Me quedo paralizada.

-De nada-sonríe tímidamente-¿Estás bien? ¿Te golpeaste algo?