Wait for me.

Capítulo 7: El enemigo tiene nombre.

Benjamin Davis tiene el don de llegar a casa justo en los momentos más incómodos.

-¿Ben?- Noto como mi boca y mis ojos hacen una "O" dado a que el hombre asqueroso tirado en mi recibidor sea tan amigo de mi hermano como para llamarle "Ben".

-Tío.- Mi hermano, el traidor aquí presente ayuda al enemigo a levantarse.- ¿Qué haces aquí? ¿Qué hacías en el suelo con Sharon casi encima?- Puedo notar como Ben se tensa y frunce ligeramente el ceño. 

-Solo le estaba dando una paliza, Ben, parece que no me conocieras...- Le espeto entrando al comedor y ambos me siguen.

-¿Paliza?- El folla-nancis pone una extraña mueca confusa.- Mira, marimacha, te estaba dejando, me enseñaron a no pegar a las chicas.- Y ahí esta el famoso guiñó de los hombres.

El parásito sin nombre, muy hijo de su mamá provoca que con ese guiño hasta la última célula de mi cuerpo se ponga furiosa.

-Bueno, bueno, parejita, más vale que no pasen de la zona de abrazos.

-Yo jamás abrazaría a eso.- Solo fue casualidad que lo dijésemos a mi vez, por lo que a mi hermano se le escapa una carcajada.

-Ya claro. - Rueda sus ojos castaños mientras pienso que el hermano que me ha tocado es el más raro que había en todo el mercado de hermanos y lo devolveré al mercado negro con un vale de compra falso a ver que me dan.

-Además...¿Por qué te dejabas si según tu soy como un hombre?.- Su cara muestra completa confusión.- Lo sabía.- Mientras yo celebro mentalmente mi victoria, mi hermano se gira a su inesperado amigo.

- Jason, ¿Dónde te metiste todo este tiempo?- Vaya, parece que el parásito resulta tener nombre.

-¿De qué se conocen?- Les señalo a ambos y achino los ojos, no dejando contestar al tal Jason.

-Ahora te interesas por mí marimacha. -Creo que tiene un tic en el ojo, porque no deja de guiñar.

-Jamás.-Gruño como respuesta.- Pero no me gusta que mi hermano se junte con gilipollas. -Sonrío.

-¿Desde cuando...-Empieza Ben.

-Cállate si no quieres joder tu vida, Benji.- Frunce el ceño a causa del mote, pero asiente y se calla. Es como mi chucho, lo tengo adiestrado.

-Tu hermano y yo jugábamos en el mismo equipo, hasta que me mudé y a él se lo llevaron a uno mejor.- Así que Jason juega a football.

-¿Al final que pasó tío? ¿Aceptaste la beca?- Los ojos de mi hermano se llenan de curiosidad, dándome a entender que debe ser bastante bueno.

Ellos empiezan a hablar de deporte, y no les escucho,  no porque no me interese, sino porque no entiendo la tristeza que reflejan los ojos de mi hermano. Estos contrastan con los de Jason, cuya mirada es tan gélida como el hielo.

-¿Sharon? ¿Estás ahí? ¿Me estas escuchando?- Me pasé demasiado tiempo pensando, el folla-nancies se ha ido, y creo que Benjamin lleva bastante rato hablando conmigo.

-Dime.

-¿Lo tienes todo preparado para mañana? Se esta haciendo tarde, más te vale no olvidarte nada.-Creo que soy pura confusión lo que hace que a mi hermano se le escape una sonrisa. 

-¿No te acuerdas?- Su risa llena la sala. PERO ESTÚPIDO, NO TE RÍAS Y DIME QUE PASA MAÑANA.- Mañana empiezan las clases.

ASQUEROSO ELEFANTE DESTROZA VIDAS. ¡SÓLO ESTÁS AHÍ ARRIBA PARA AMARGARME LA EXISTENCIA! Y si, creo que en el cielo hay un elefante gordo que domina el universo.