This is my story

Capítulo 5

Me aproxime a la ventana de mi habitación y mire hacia la calle a través de ella, observando como él se alejaba a paso lento.

-¿Enserio hizo eso? -pregunto mi amiga por el teléfono

-Si -hable-. Ruth, fue muy raro estar a solas con él... pero lo mas raro fue que me sentía bien con su compañía y cada vez que me hablaba era como... ¿Como es posible si apenas lo conozco?

*Flasback*

-No...-dije vacilante

-Vamos, sera algo único en tu vida

-Hay muchas cosas únicas que quiero hacer pero sin duda esta no está en mi lista de deseos.

Matt pretendía que entrara en un pequeño castillo rosa que se vendía especialmente para las niñas. Dentro de este había una mesa con sus dos pequeñas sillas a los lados y una alfombra justo debajo

-Que van a pensar los clientes cuando me vean ahí

-Que eres muy enrollada -rió-. Además era esto o que te despidieran porque te rapte y arrastrarte a un restaurante de verdad para tener nuestra cita

Me empezó a dar pequeños empujones para lograr que entrase al castillo pero yo me resistí

Si, fue inútil

-¡Queee noo! -me queje intentando empujarlo al lado contrario-. ¡Socorro me violan! -grite

Al final acabe dentro del castillo mientras Matt aplacaba la puerta para impedir que yo escapase.

Enfadada me senté en la pequeña silla.

Esto simplemente es ridículo...como me vea alguien aquí...

-Y ahora que -pregunte enfadada

-Pues ahora quiero conocer un poco mas de ti

[...]

-Puedo llegar a casa sola

-No, no puedes

Matt me tenia en brazos como una princesa. Antes al salir del 'odioso castillo color rosa chillon' me "tropezé" y me raspe una rodilla además de golpearme la cabeza por la baja altura del techo

-Nunca conocí a una chica tan despistada

-¡Pero si me pusiste la zancadilla tu, estúpido!

-No me culpes a mi, no tengo la culpa de que seas tan patosa.-se burlo

Aun seguía lloviendo y mi chaqueta ya estaba empapada al igual que la de Matt, de nada servía ponerse el gorro si ya estaba completamente mojada

-Chico estúpido ¿no se te ocurrió traer paraguas?

-Princesa patosa ¿acaso no se te ocurrió a ti?

-Touché

Los coches pasaban por nuestro nado y salpicaban provocando que nos mojásemos aun mas.

La lluvia comenzó a caer con mas fuerza. Odiaba este día

-Sácate la chaqueta -ordeno Matt

-¿Me...me vas violar? -tartamudee

-No, boba -me dejo en el suelo con cuidado-. Solo no quiero que te resfríes

Después de eso el se quito la chaqueta que llevaba puesta y me la coloco a mi.

Era gruesa y no estaba tan mojada como la mía ya que su material lo impedía.

-Pero entonces tu también te resfriaras -conteste subiéndome esta vez a su espalda para que no me volviera a alzar como una princesa

-Si, pero mi cuerpo podrá aguantarlo -rió-. Porque soy bien macho

Le estire del pelo consiguiendo que el perdiera el equilibrio y casi cayéramos al suelo. Por suerte fue lo bastante rápido y apoyo mi espalda a la de un árbol pudiendo asi estabilizarse de nuevo

-Estas loca.-afirmo

-Yo solo quería molestarte, no tengo la culpa de que te balancearas, perdiésemos el equilibrio, y tengas músculos de niña

-¿De niña?- pregunto mirando hacia las casas. Luego se dejo caer hacia atrás.

Ahora yo estaba chafada por un hombre de poco musculo pero que pesaba 2 toneladas y un árbol que me raspaba la cabeza

-¡Hombre de poco musculo aparta que moriré chafada! -rechisté

Giro hacia la derecha para poder mirarme a la cara y se las arreglo para que yo siguiese con las piernas enredadas alrededor de su torso

-¿Que haces? -pregunte un poco nerviosa por la cercanía de nuestros rostros, por la INMENSA cercanía de nuestros rostros. Es mas, podría afirmar que las paginas de los libros de mi estantería están mas separadas que nosotros.

-¿Por que preguntas eso?¿Acaso me acosas? -levanto una ceja

-¿Que hablas? -ahora era uno de esos momentos en los que me pierdo y no se de que hablaba

Mis ojos no aguantaron las ganas de mirar sus labios, esos labios tan carnosos y apetecibles que conocí hace poco y los que tantas ganas daban de besar. Me sonroje al pensar en tal barbaridad.

Matt al igual que yo bajo su mirada a mis labios los cuales yo me mordía con fuerza

-Si los sigues mordiendo mas fuerte sangraran -se burlo

Rápidamente aparte mi mirada de sus labios pero esta vez los clavé en sus hermosos ojos esmeralda con un toque de marron...dios ¿este chico no tenia ningún defecto?

Nos quedamos así un buen rato sin que ninguno de los dos se animara a hablar o moverse. Las gotas de aguan caían lentamente por su cara pero a él no le parecían importar

Decidí romper el silencio, gran error:

-Mi hermano me estará esperando -dije tímida

-Oh...si, claro, vamos -se volteo poniéndome de nuevo en su espalda y comenzando a andar