This is my story

Capítulo 6

Me lave la cara varias veces y salí del baño ya lista para irme. Jake se había ido a una acampada con sus amigos por lo cual tenia la casa solo para mi.

Eché llave a la puerta y me dirigí a la calle.

Hacia bastante viento y por ello la gente iba abrigada de pies a cabeza.
Entre a una cafetería que quedaba cerca de casa y tome asiento en la barra

-¿Que va tomar? -dijo una mujer mientras secaba un baso con un pequeño trapo. Parecía bastante amable y cariñosa.

-Cafe con leche por favor -respondi con una sonrisa calmada

-¿Nada mas? Muchacha estas muy flaca para ser tan joven -empezo a decir-. Deja que te invite a un aperitivo, tienes que estar fuerte y sana. En mi epoca si una chica tenia tu aspecto significaba que no comia bien. No se que le pasa a vuestra generacion que quiere estar siempre flaca, estais locos.- vaya que si hablaba

-No yo...no hace...-intente decirle que no quería nada pero ella ya se marcho a cocinar

Saque mi móvil y le mande un mensaje a Jake para preguntar que tal le hiba:

Yo- Rubio de bote, que tal vas?

Feo- Nada aqui intentando hacer fuego, Tyler se olvido el mechero

Yo- Yo te dije que te llevaras uno pero me ignoraste

Feo- Tengo hambre enana

Vi como la señora de antes se hacercaba hacia mi con una bandeja y el pedido

Yo- Luego hablamos, es que voy a comer

Le escribí y le mande una foto de mi apetitoso almuerzo

Feo- Mala gente :(

Yo- :v

Apage mi móvil y lo deje encima de la barra

-Que aproveche -me dijo la señora

-Gracias -sonreí

Me había traído el café con leche que pedí acompañada de galletas que llevaban pepitas de chocolate y magdalenas de chocolate que tenían nata por encima además de una gran tortilla de patatas que ocupaba la mitad de la bandeja

Mañana tendre que empezar a hacer ejercicio sin duda

Comí cada cosa que me trajo sin rechistar hasta que acabe con todo

-¿Cuanto le debo? -llame a la señora que ahora estaba apoyada en el mostrador

-Nada -contesto-. Tómatelo como un regalo de navidad anticipado -dijo alegre

Se lo agradeci para luego despedirme amablemente y cuando se giro le deje el dinero encima de la mesa y salí corriendo.

El pensar que me había servido tanta comida, me había tratado tan bien y encima no me había cobrado me dejo lo suficientemente claro que debía pagarle si o si.

Escuche como la señora me grito desde la puerta pero hasta eso yo ya estaba bien lejos

***

Estaba tranquilamente paseando por las calles sin ningún rumbo acordado pero me pare cuando vi una casa familiar, una casa especialmente llamativa

Estaba en ruinas y algunas ramas salían por dentro de las ventanas

Di la vuelta a la casa llendo al patio trasero en el que había un árbol enorme.

Logré ver que en su cima había una casa de madera

-Una casa del arbol -pense y sin dudarlo subí hasta ella

Los escalones aun se conservaban bastante bien y la casa parecía estar impecable a diferencia de la casa principal

Cuando llege a ella encontré muñecas y cochecitos de juguete esparcidos por el suelo. Al fondo había un baúl con un cartel deteriorado por el tiempo, en el ponía:

«No tocar, propiedad de Papa Noel»

El baúl tenia echado un pestillo pero lo rompí al darle un pequeño golpe

Al abrirlo encontré una bufanda de color rojo en perfecto estado al igual que todas las cosas que había dentro. Una pequeña llave me llamo la atención, era dorada y de una forma algo extraña. Me la guarde en el bolsillo y seguí mirando las cosas de ese curioso baúl.

A la derecha había una caja con otro cartel sobre ella que ponía:

«Si has conseguido abrir este baul y no eres Papa Noel te recomendaría que no vieras esto»

Ignore ese cartel y saqué la caja para luego abrirla

Dentro había un colgante plateado con una piedra azul alargada en su punta. En el estaba tallada una frase

«Queda prohibido no sonreirle a los problemas, no luchar por lo que quieres y abandonarlo todo por miedo»

Me preguntaba a quien pertenecía ese colgante y por que razón lo había abandonado en este lugar.

Detrás vi unas iniciales, "S.M" ponia

Cuando me dispuse a guardar la caja en sus sitio encontré una carta exactamente debajo de donde antes estaba la caja. La abrí y leí en voz alta

«Pequeña como habré podido adivinar ya habrás visto el colgante, te informo que perteneció a tu abuelo actualmente difunto...esas fueron sus ultimas palabras. Ese mismo colgante me lo regalo en su fallecimiento y lo he guardado como mi mayor tesoro especialmente para ti. Espero que esas palabras te ayuden a recordar que nunca debes rendirte, lucha por lo que quieres pequeña, nunca te des por vencida, recuerda que el mundo se acabara solo cuando tú decidas que a llegado a su fin. Y aquí desde posiblemente la tumba te propongo un juego, en esta ciudad hay escondidos 10 sobres cada uno de distinto color. Cada uno de ellos tiene una frase que te ayudara a ir por el siguiente. Aquí esta tu primera pista:

"Tal vez no recuerdes ese lugar que tanto te gusto visitar junto a mí. Tengo fe en que el sobre de color verde siga enganchado debajo del banco del que todo se ve. Aún recuerdo que me dijiste 'la ciudad se ve hermosa desde este lugar' y como no olvidar tu sonrisa al ver como la noche llegaba y todas las luces de la ciudad se prendían a la misma vez"

Tendras tu recompensa al llegar al final de este juego. Buena suerte.

Att: E.M»

Vaya... ¡Y yo como demonios voy a saber lo recuerdos de la niña de la que habla si no recuerdo ni los mios! Pero de todos modos parecía un juego entretenido y estoy muy decidida a acabar ese juego aunque no sea la persona indicada.

Frustrada guarde el sobre y el colgante en mi bolsillo. Volví a cerrar el baúl y lo tape con algunas ramas por encima para que nadie lo encontrara.