Reflexiones e Historias Cortas

La Existencia de la Inexistencia

Este es un mundo con muchas personas. Un mundo en el que viven los altos y los bajos, los gordos y los flacos, los guapos y los feos, los rubios y los morenos. Este es un mundo donde cada día te cruzarás con personas simpáticas, cariñosas, desagradables e hipócritas. Este es un mundo en el que nadie se repite, porque todos son diferentes. Y no sólo hay variedad en las personas. Un olivo es diferente al resto de los olivos, un oso polar es diferente al resto de los osos polares y una piedra tiene una forma y un tamaño distintos a las otras piedras. Porque cada copo de nieve es distinto.

Vivimos en un mundo de diversidad y pluralidad. Un mundo donde hay de todo, en lo conocido y en lo desconocido. Porque lo que conocemos es una gota de agua, y lo que desconocemos es el océano.

Vivimos en un mundo lleno de cosas, tanto materiales como abstractas. Un mundo formado por olores, texturas, colores, sabores y sonidos. Un mundo lleno de emociones. Un mundo en el que todo es posible, porque la imaginación lo posibilita todo.

Vivimos en un mundo donde se imagina lo inimaginable, donde lo irreal se vuelve real. Un mundo lleno de conceptos que se pueden plantear.

Pero no vivimos en un mundo inmortal. Habrá un momento en el que el mundo desaparecerá.

¿Te podrías plantear la ausencia del mundo? Una Nada en la que no vive nadie. Una Nada sin personas, ni altas ni bajas. Una Nada sin tiempo ni espacio. Una Nada donde nada existe. Sin colores, sin olores, sin texturas, sin sabores, sin sonidos. Una Nada sin cosas materiales. Una Nada sin cosas abstractas. En la que no caben los sentimientos de las personas. En la que no cabe la imaginación. En la que no cabe la realidad.En la que ni siquiera cabe el planteamiento de lo que es la Nada.

La Nada es inmortal. Pero la Nada no existe. Nunca podrá existir porque la Nada es la inexistencia. La Nada es todo lo contrario al mundo que conoces y vives.

Pero puede ser que el mundo que tú conoces sea una mera ilusión creada por la Nada. Puede ser que tú vivas lo que la Nada quiere que vivas. Puede ser que nada exista realmente. Puede ser que tú mismo no existas.