Capitulo 5

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-Maddison, levántate. -me hablo mi mama mientras me quitaba las cobijas y las tiraba al suelo-.

-Mmh, cinco minutos mas. -me queje-

-Levántate ya, recuerda que Calum pasara por ti y no quiero que llegues tarde ala escuela. -escuche sus pasos hacia el baño y segundos después se escucho el sonido de la regadera-. -Vamos entra a bañarte, te esperamos a bajo para que tomes algo de comer antes de irte.

-Si

-Maddison, por favor usa ropa decente. -me vio severamente-.

-Ni empieces, ¿quieres? Yo me vestiré como quiera, ahora sal de mi habitación.

Mi mama salió de la habitación y camine hacia el baño, me metí y me di una larga ducha, salí y me coloque unos jeans negros ajustados, una blusa holgada gris, mi chaqueta de piel negra y mis vans negras, deje mi cabello suelto y coloque un poco de maquillaje. Baje a la cocina y tome una manzana, camine hacia la sala y me senté a ver tele para esperar a que llegara Calum.

Después de unos minutos se escucho el timbre, corrí ala puerta y hay estaba Calum parado en el marco de la puerta.

-¿Lista? -me sonrió-.

-Supongo. -alce ambos hombros- -Mama ya me voy -grite desde la puerta-.

-¡No tomaste tu desayuno! -gritó-.

-Compro algo en la escuela. -y sin mas salí de la casa junto a Calum y comenzamos a caminar a la escuela.

(••••)

Durante el transcurso del camino ala escuela nos mantuvimos en silencio. Yo iba metida en mi mundo y de vez en cuando Calum me echaba una mirada rápida, después de unos minutos llegamos a lo que seria mi nueva escuela. Muchos jóvenes caminaban hacia esta, otros llegaban en sus autos.

-Tenias razón, si es linda.

-Te lo dije, ahora te llevare ala dirección para que tomes tu horario.

-No hace falta, puedo hacerlo sola. -le dije mientras caminábamos hacia la entrada de la escuela, varios alumnos nos observaban fijamente pero no les tome importancia.

-Vamos Maddison, solo déjame acompañarte ala dirección y ya después de hay tu te vas sola a tu clase, no seas terca. -me miro-.

-solté un bufido-. -Ya que. -Calum soltó una risita y me tomo del brazo y me guío por unos de los pasillos de la escuela-.

Mientras caminábamos por los pasillos trataba de memorizar el nombre de las aulas, así no me sería difícil encontrar alguna.

-Bien, aquí es. -se detuvo frente a una oficina.

-Gracias, ahora ya ve a tu salón, no quiero meterte en problemas. -Levante la mirada para poder verlo a los ojos, ya que estaba un poco más alto que yo-.

-¿Quieres que te espere a la salida?

-¡Si! -grite- -Digo, si... Necesito que me hagas un favor, pero eso lo hablamos en casa. -trate de verme tranquila, pero necesitaba la ayuda de Cal para enviarle la carta a Dylan-.

-Bien, te veo en un rato. -antes de irse beso mi frente y desapareció entre la poca gente que quedaban en los pasillos.

Quite los restos de bacterias que Calum me había dejado en mi frente frotando mi mano en esta, toque varias veces la puerta que tenía un letrero que decía "Dirección" hasta que escuche una voz ronca del otro lado que grito: adelante. Gire la perilla y entre ala pequeña oficina, estaba un señor regordete, pelo canoso, piel morena clara, ojos grises y una gran sonrisa plasmada en su rostro.

Over Again || Michael CliffordDonde viven las historias. Descúbrelo ahora