No ha pasado mucho tiempo desde que te perdí, en realidad, en mi cabeza aún no cabe la idea de que me has dejado sola; porque tu eras el único que me entendía, no es cierto?.
Perdona por seguir pensando tanto en ti, por seguir sintiendo tanto dolor al escuchar tu nombre, por llorar todavía cuando tus recuerdos se encuentran casi reales ante mis ojos.
Me he dicho miles de veces que nunca voy a superar esto, que después de ti, mi vida ha perdido ya casi todo el sentido, me he dicho que a pesar de que no fuiste un capricho, tu decisión fue egoísta puesto que me hubiese gustado irme contigo, cuando se completamente que al final, no fuiste tu el que jaló el gatillo, y yo, me hubiera acobardado y hubiera huido.
Me dueles, cariño, me dueles en el recuerdo, en la mente, en el corazón, me dueles en el alma, en la existencia, en los ojos que vislumbran nada.
Y después de todo, quizás tambien quiero darte las gracias, gracias por compartir el tiempo valioso para ti conmigo, gracias por desperdiciar palabras, por regalar miradas, por deslumbrarme con tu sonrisa que calmaba el alma.
Gracias, gracias, gracias por haber existido y porque aunque no lo quieras te llevo en un pedacito mio, mi pedacito de estrella, mi cachito de cielo, mi pequeño motivo, nunca te olvidaré y de eso, de eso sí que no hay ni habrá jamas alguna duda, mi pedacito de locura.
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Mañana será otro día
RandomPensamientos y palabrería de una chica que hace mucho tiempo olvidó que la vida es eso que pasa todos los días y a sus 20 años aún no encuentra su lugar en este mundo.