Los cuatro guardianes

Capitulo "Amor de felinas"

Todos los habitantes del valle de La Paz caminaban rumbo a un lugar desconocido en la noche guiados por los guardianes y los cinco furiosos, Po caminaba junto a su novia Hinata la cual solo lo tomaba de la mano ambos le daban un leve empujón con las caderas al otro, los dos se divertían un poco, mientras atrás Tígresa iba molesta cruzándose de brazos viendo todo la escena, Víbora vio hacia donde miraba Tígresa y decidió acercarse.

Se que te molesta ver a Po con alguien mas pero debes aceptarlo Tígresa -dijo Víbora en un tono calmado y Tígresa gruño-
Víbora no me rendiré así nada más se que el me ama todavía y lo recuperare -dijo Tígresa segura, y Víbora solo bajo la cabeza negando-

Se que no eres de las que se rinden pero solo te pido esto, no le hagas daño a Po ni hagas que terminen de forma horrible por que se que no eres así piénsalo bien antes de actuar -dijo Víbora con pena y Tigresa asintió seria-
Tígresa se adelantó un poco llegando al lado izquierdo de Po y lo tomo del brazo.

He Po dime a donde llevas a todos los habitantes? -dijo Tígresa melosa, Hinata gruño bastante y jalo a Po alejando lo un poco de Tígresa, mientras Po trataba de soltarse pero Tígresa era fuerte-
Los llevo al campamentos de las damas de las sombras -dijo Po calmado tratando de separaré de Tígresa, en eso ambas felinas quedaron sorprendidas mas Tigresa ya que sabia que encontrarían en ese lugar y solo apreto el brazo de Po con fuerza-

Po dime que no le pedirás a Song y su grupo de gatas ladronas que nos den asilo o si? -dijo Tígresa gruñendo un poco y Hinata se puso seria-
Gatas?! Nos llevas a un campamento lleno de gatas?! En que piensas querido? -dijo Hinata molesta sonríendo apretando el brazo derecho de Po haciendo que el panda suelte quejidos-

Lo que pasa es que Song tiene un enorme campamento y se lo pedí de favor, ella aceptó pero no pasara nada entre nadie del grupo lo juro -dijo Po quejándose del dolor haciendo la voz aguda- hay no siento mis brazos
Po dormiré contigo para evitar que una gata ladrona no intente nada contigo -dijo Hinata seria y Po asintió rápido-

Tu no dormirás con el! Yo dormiré con el para vigilarlo! -dijo Tígresa y los dos se pusieron serias dandole una mirada enojada a la otra-
Hinata dormirá conmigo y no pasara nada Tígresa! Ya no siento el brazo! -dijo Po con una voz aguda y Hinata sonrío alegre haciendo que Tígresa se enojara y lo soltara de golpe, ella se fue de brazos cruzados, Po solo gimió como niña aflojando su brazo tratando de sentirlo- dios que feo
Po dime por que vamos al campamento de Song se que solo es tu amiga pero me siento intranquila si ella intenta algo contigo -dijo Hinata sonando herida haciendo sentir mal a Po-

Tranquila no pasara nada te amo y lo sabes Hinata -dijo Po sonríendo abrazando a Hinata- además tu me cuidas mucho jeje
Jejeje yo también te amo Po y sabes que necesitas que te vigilen tu titulo llama mucho la atención de las chicas -dijo Hinata sonríendo dejándose abrazar por Po, ambos se dieron un beso rápido y siguieron avanzando por un rato mas-

Mientras Orochi en su forma humanoide avanzaba sin rumbo llegando a un pueblo lejano devastado, las casa destruidas y en ruinas, los habitantes muertos parecían haber sido cortados por una espada rápida, Orochi camino por el pueblo devastado respirando agitado pero sonrío al ver el rastro de destrucción.

Ese Ebirah volvió a destruir con mucho entusiasmo -dijo con burla camino por un rato mas y vio un palacio intacto al final de pueblo-
Orochi camino por un tiempo hasta entrar al palacio que era para alumnos de Kung fu, dentro estaba una mapache de pelo café oscuro de traje azul rey, tenía varias cortadas en el cuerpo y unos lentes rotos a su lado, también había unos leopardos súper feos delgados con trajes azules, todos cada uno de ellos muerto y con cortadas por todo el cuerpo.

Ya veo el mato a esos sujetos solo para darme el palacio y que pudiera habitar aquí -dijo Orochi viendo el lugar, camino un poco hasta que vio lo que parecía un trono o algo un poco mas pequeño de color negro con amueblado rojo, el sonrío y se sentó un poco estirando su cuerpo- es un buen momento para descansar mi cuerpo después de estar encerrado tanto tiempo, tuve que usar mucho poder, lo poco que me quedaba, el durazno estuvo purificando el poder que me devoraba por muchos siglos