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Cap 5

Año 2034
Era viernes a la mañana y Arami se encontraba desayunando para dentro de un rato asistir a su jardicito amado.
Maira estaba terminando de acomodarse un pañuelo en su garganta, ya casi lista para llevar a su niña a la escuela y ella entrar a trabajar de lo que ama, enseñar a sus alumnos en el mismo establecimiento en la que se educa su hija. Terminan el desayuno y suben al coche. Maira al volante y su hija en el asiento de atras. Llegan al estacionamiento y Maira conduce a su hija al jardin. Se despiden con un beso. Maira da pasos rapidos para dar la primera clase del dia de hoy. Entra a su primera clase, todo marcha bien... o al menos por esos momentos.

Ya eran las 11 del medio día. Mai termina de dar sus clases y decide encaminarse para ir a recoger a su hija.
Baja las escaleras saluda a unos alumnos y sigue su camino.
Llega a la entrada y no ve a su hija por ningun lado. Se aproxima a una de las maestras jardineras.

-Disculpe seño, conoce a mi hija Arami?-

-Si, usted es la madre?-

-Si, la estoy buscando y no la encuentro.-

-Pero.. señora, informaron que usted no iba a poder buscar a su hija asi que alguien más la recogió.-

-Que QUE?! Yo jamas dije eso! y jamas lo haria!-

-Pero si no lo hizo... alguien más se llevó a su hija!-

-Quien! usted vió a la persona que lo hizo?!-

Se acerca otra de las maestras que al parecer habia escuchado la conversacion atenta.

-Creo que vi medianamente como era la persona que se llevó a su hija..-

-Digame por favor!-

-Era un hombre no muy alto, usaba una campera negra de lana y unos jeans. ah, y era alguien ruludo.-

-Ay noo...- dijo maira en un susurro y se cubrió la boca con sus manos. Cayó al suelo arrodillada con la cabeza baja. Las maestras trataron de calmarla pero...

-Señora Gutierrez por favor calmese. Avisaremos todo esto a las autoridades y encontraremos a su hija..-

... ya era tarde.

Maira se levanto del suelo con la mirada en un punto fijo que nadie sabia de donde provenia. Su mirada cambió y se volvió profunda como si quisiera asesinar con tan solo una mirada de esos ojos celestes. Tenia corrido el maquillaje lo cual hacia que se viera como alguien destrozado y sufrido. Salió del jardin y condujo el auto a toda velocidad. Llegó a la casa y corrió a su habitación. Sacó debajo de su cama una caja que contenía una pistola y junto con él un telefono sin usar. Lo tomó entre sus manos y marcó un número.
Contestan la llamada.

-Donde la tienes?! Se que te la llevaste... pero, porque...-

-Acaso no tengo derecho? Despues de todo... es mi hija no es cierto?-

- Tu no eres su padre. -

-Tiene mi sangre. Claro que soy el padre.-

-Padre es aquel que cria a sus hijos, no el que los enjendra y luego desaparece.-

-No me interesa. Soy su padre y punto.-

-Donde esta!!-

-Si tanto la quieres, ven y buscala... sabes donde vivo.-

-Preparate, porque de esta no te salvas.-

-Te espero...-

Maira recoje el arma, sale de su casa todavia con su ropa de trabajo y arranca el coche. Se dirije al barrio de... Gastón. El que tendría que haber asumido el papel de padre de Arami.
Llega y abre la puerta con furia. Camina a paso veloz y se adentra en ésta.
-Aramiii!!! Donde estas!!-