Hoy quiero escribirle al mundo, pero no al mío, a el de todos, a los millones de mundos que existen en cada uno, quiero escribirle a la vida, quiero escribirle a él vivir, a la naturaleza y a quien la destruye, a los monstros ''intelectuales y pensantes'' a los relativamente inteligentes que nos auto destruimos.
Quiero escribirte a ti amigo, no se tu nombre, no conozco tu situación, a ti que me lees no se tu sexo ni etnia, no conozco tu rostro pero eso hacen los apasionados a las letras (desudar el alma de quien los lee aunque no sepan exactamente quien los lee ) , te escribo a ti mi amigo solitario, a ti que no escuchas hace mucho un ''buenos días'' y que hace meses o quizá años no recibe un beso de buenas noches. Te escribo a ti querido lector que sale muy a menudo con sus amigos, que su deleite esta en los placeres de la vida cotidiana, si, tú que estas rodeado de personas que aparentan estar llenas de alegría, que tienen artíficial hermosura, ellos los que exteriormente son hermosos y llevan una vida ''perfecta'' pero, ¡a ver vamos! Están realmente vacios no conocen el amor, no conocen la real belleza, no conocen la sinceridad.
Le escribo a la grata compañía de un amor, a un beso sincero en un aeropuerto, a una oración de corazón en la sala de un hospital. Le escribo a el dolor de un hombre que hoy en día es un sabio y venerable anciano, que ya llego al fin de su camino y está esperando el ocaso del sol para marcharse y con si llevarse el hermoso recorrido de la vida, de ese camino lleno de piedras y de hermosas rosas, que en él aprendió a amarlas junto con sus espinas.
Te escribo a ti mi amiga, si tu, la que ha sufrido por un hombre, la que siente que su mundo está destruido y su única opción es reconstruir uno nuevo lleno de barreras, a ti que éstas en tu cama recordando los momentos hermosos al lado de esa persona, tú que sientes que jamás volverás a amar, si, te entiendo; pero lo malo no es el amor, lo malo es no saber amar ¡vamos! Levanta la mirada, sonríe, sécate esas lagrimas, sal a un parque, comparte un helado con un amigo, disfruta nuevamente un atardecer, vuelve a sentir el sabor de un café en la mañana, la vida no se ha parado, te paraste tu, el mundo sigue girando, el tiempo sigue corriendo, tu corazón sigue latiendo ¡eso es lo que ahora cuenta!.
Le escribo a los enamorados, a los que sueñan con un amor infinito, los que escriben cartas de amor, los que se identifican con cada canción de amor que suene en la emisora, los que duran horas y horas hablando con la misma persona sin aburrirse, los que tienen un mundo perfecto de amor y risas. Le escribo a los que no encuentran motivos para vivir, si a ti amigo, que estas ''destruido'', que sientes que todo acabo y que ni respirar tiene sentido, a ti que ya no tienes más lagrimas para llorar y que te sientes solo en una nube inerte, ¡oye! Pon tu mano en tu pecho, salte de la rutina, olvida los afanes de la sociedad e ignora el ruido de la calle, quédate en silencio y ahí con tu mano en tu pecho, ¿sientes eso? Es tu corazón, ¿puedes oír ese sonido que provine de tu pecho? Se llaman latidos y es la mejor música que tus oídos podrían escuchar, ahí está, ese es el motivo sonríe, ese es un motivo para vivir, deja de quejarte. mejor mira hacia el frente, respira, toma lo aprendido de esta situación y bota lo que no sirve, dale, aunque te duela ya verás que todo mejorara. Le escribo a el desamor, a el hermoso y necesario desamor, a ese que nos destruye, pero que nos vuelve más fuertes y maduros, a ese que nos enseña a perder, si, ese que todos hemos sentido alguna vez, a el amor no correspondido, a el amor hacia tu amigo/a, que te ve como nada más que un amigo/a, que no sabe que le amas, si, es triste, pro esa la forma más hermosa de la vida enseñarnos que noto lo que queremos lo podemos tener.
Le escribo a los poetas, a los que conocen a profundidad el término ''sensibilidad'', esos que nos enseñan lo hermoso de la vida y sus relativos defectos, esos que plasman sus más hermosas líneas en un papel, que inmortalizan la belleza de un pensamiento, esos que están en vía de extinción. Le escribo a los tontos superficiales, esos que no conocen la belleza natural y profunda, para los que los ''pequeños'' detalles son fáciles de ignorar, los que no le hayan forma a las nubes, si, tú que no lees las historias en las estrellas ¿acaso sabes cuan hermosa es la luna y su compañía?, ¿conoces la música? ¡A ver! ¿Sabes cuan hermoso canta un ave? ¡Oye! ¿Cómo vives si regalar o sacar sonrisas a quienes lo necesitan con urgencia? , a ti mi amigo que crees que vivir es ''nacer, crecer, hacer dinero, reproducirse y morir'' ¡jajajaja! Permíteme reírme eso es solo un ciclo de vitalidad, eso no es vida.
Le escribo a el amor, a el amor loco, a el amor cuerdo, a el amor de un padre, a el amor de una madre. Le escribo a el amor de un amigo, a el de un pequeño hacia su madre, le escribo a el amor de músicos, a el amor de poetas, a él mor de filósofos, a el amor de adolecentes. Le escribo a el amor, a el mas profundo e indecible de todos a el amor de Dios.
Le escribo a la vida, a la muerte, le escribo a la belleza y a la fealdad, le escribo a la misericordia y a la crueldad, a los enamorados, a los melancólicos, le escribo a la soledad y a la grata compañía, a los detalles de la vida, a los lectores que prefieren explorar nuevos mundos atreves de las hojas de un libro, a los cantantes, a los silenciosos. Le escribo a la felicidad, le escribo a la tristeza, a las hermosas sonrisas, a las lagrimas o a ambas mezcladas, le escribo a el mundo, a tu mundo, a mi mundo.
Esta es mi carta, esto es lo que veo y lo que quiero expresar desde mi mundo hacia el tuyo, y no soy distinta a ti, no soy más que tu, tampoco soy menos, soy yo en ti, eres tú en mi, soy música, soy poesía, soy belleza.... soy la vida. -Máida Córdoba-.
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INTENTOS DE POESIA.
PoetryUn libro que lleva fragmentos de un alma rota. Una vida que desea transmitir a muchas otras través de sus letras.