Living the Changes.(1D) 2º libro.

Cap. 3. !Sigo adaptandome!

Ivy pov.

-No quiero presionarte a que me lo digas, pero que sepas que cuando quieras aquí estoy. -Me hizo saber Louis mientras arrancaba el coche.

-Gracias, pero es que...-Hable secando mis lágrimas con las yemas de mis dedos.

- ¿Quieres ir a algún lado? Conozco un sitio que te gustara. -Menciono con entusiasmo.

-No hace falta Louis.

-Ese lugar alegra a cualquiera, confía en mí. -Continuo mientras asentía con la cabeza.

Seguimos un rato más en coche, a la vez que sentía la calidez de Louis en su mano la cual sostenía la mía, soltándola tan solo, para cambiar la marcha del vehículo... Aparco frente a unas casas algo lujosas que apenas llegaban a sonarme, o tal vez no llegaba a reconocerlas por la tenue luz nocturna.

-Creo que será más efectivo si te dejas llevar y no ves más que el suelo que tienes que pisar. -Menciono sonriendo.

-No tengo muchas ganas Louis...

-Ivy, vamos. -Aclaró con una voz más grave de lo normal.

-Vale. - ¿Cómo podía negarme a esa sonrisa?

Salimos del coche de Louis, caminando a paso ligero mientras me tapaba los ojos con las manos, para hacer caso a la idea que él había tenido. Tan solo podía notar el tacto que mis botas aplastaban a cada paso siendo la fría y mojada hierba...

-Adelántate un poco, pero no mires aun. -Volvió a decir una vez subido alguna cuesta mientras mis manos hacían su trabajo quitando mi campo de visión. -Ahí estas perfecta.

Note la calidez de Louis esta vez, detrás mía, sintiendo como su busto se pegaba en mi espalda. Continuaba sintiendo sus manos todavía con una temperatura más elevada que la del ambiente, sujetar delicadamente mis muñecas y poco a poco como las apartaba de mis ojos...

-Louis...-Masculle viendo todo Londres iluminado.

-Desde aquí se ve toda la ciudad, brilla por si sola y quiero que tú lo hagas también, que nadie te apague otra vez. -Habló rodeando sus brazos sobre mi cintura, apoyando su barbilla en mi hombro derecho.

-Wow, es precioso... Gracias. -Dije sonriendo. Mis padres se equivocaban y poco a poco ellos solos, se estaban equivocando con esta persona que me hacía tan feliz.

Me gire un poco sin hacer que sus brazos dejaran de rodear mi cuerpo, creando que nuestras miradas se cruzaran a escasos milímetros. Le dedique una sonrisa, antes de voltearme por completo entrelazando mis brazos por su nuca. Bese sus labios entre una mezcla de dulzura y ansias por hacerme sentir tan segura con él, formando que sus labios se movieran del mismo modo que los míos, como si fuera el mismo empuje el que nos estaba invocando a que nuestros labios se acariciasen entre ambos, sintiendo como mi estado de humor cambiaba contagiándose del suyo.

Me separe lentamente abriendo mis parpados, regresándolos a su silueta y viendo aquel rostro tan especial para mí...

Después de varios minutos observando aquellas preciosas vistas, el frio empezaba a hacerse patente en nuestros cuerpos, sin dejar que el abrigo hiciera bien su función. Por ello decidimos volver al coche... Las cuestas de Primrose Hill, eran algo largas y resbaladizas. Cuando Louis quiso hacerse el "valiente" bajando corriendo por una de ellas, resbalo con ambas piernas cayendo a uno de esos charcos, que lo único que contenían era una mezcla de barro y agua.

-Jajaja, lo estaba viendo. -Reí ante su caída.

- ¿Así? Iba bien hasta esa maldita piedra del medio.