Capítulo 7: Sueños y desesperación

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Itachi Uchiha

Ver a Naruto tan cerca de mi hermano no me había gustado nada. Estaba metiéndole mano y eso no podía permitirlo. Me habría gustado decir que era porque odiaba que tocasen a mi hermanito pero no era verdad, me engañaba a mí mismo, eran celos, no soportaba que nadie excepto yo le tocase, él era mío, todo su cuerpo era mío, su tatuaje lo demostraba.

En el coche no hablamos en absoluto. Sasuke se quedó mirando por la ventanilla y yo variaba mi mirada entre la carretera y la entrepierna de mi hermano. Aún estaba excitado, había sentido su miembro despertarse cuando me pegué a él besándole en ese pasillo, sentía algo por mí, le había gustado el beso aunque siguiera fingiendo que me odiaba. Seguía siendo mi hermanito, seguía queriéndome.

- ¿Tanto te gusta lo que ves? – me preguntó de golpe y yo detuve el vehículo frente a la puerta de casa, sabía que Konan no estaba en casa aún. Su coche no estaba aparcado.

- ¿Tan cachondo vas que hasta intentas provocar a tu hermano? – le pregunté.

- Hace seis años no te importaba mucho que fuéramos hermanos – me dijo sonriendo - ¿Aún quieres follarme? – me preguntó de forma sugerente mientras se quitaba el cinturón de seguridad del vehículo y se acercaba hacia mí.

- Déjate de tonterías Sasuke – le dije apartándole un poco de mí y tirándole contra el asiento de nuevo pero él sonreía - ¿De qué te ries?

- Has perdido los nervios dentro del bar, hasta me has besado, que patético, creí que ahora te gustaban las chicas – me dijo riéndose de mí.

- Me gustan las mujeres – le dije muy serio.

- Ya no te creo.

- Entonces te demostraré que no siento nada por ti Sasuke – le dije quitándome esta vez yo el cinturón de seguridad y acercándome a él atrapando sus labios entre los míos.

Sasuke se dejó, de hecho... me metió la lengua con fuerza y me excitó su beso. El condenado seguía teniendo esos labios que me volvían loco, esa forma de seducirme. Antes era el chico dulce e inocente que me excitaba, ese chico al que le quité su virginidad y con el que disfrutaba controlándole a mi antojo, llevándole a mis juegos, pero ahora todo había cambiado, tenía ante mi un Sasuke muy controlador, ya no era ese chico dulce y tierno, era borde, con carácter, frío y altanero, pero me excitaba aún más cuando se resistía a mí, cuando él era quien controlaba el juego como ahora, era él quien estaba metiéndome la lengua haciéndome disfrutar y jadeé levemente en su boca hasta que él sacó una sonrisa prepotente.

- Aún te excito, Itachi – me dijo y me di cuenta de que había perdido esta batalla, no podía demostrarle que me gustaban las mujeres porque no era cierto, le amaba a él.

- Sólo eres un crío del que ya no sé nada – le dije hiriéndole, vi su mueca de dolor ante mis palabras y me bajé del coche para entrar en casa.

- No soy un crío – escuché que bajaba él detrás de mí – yo ya no soy un crío, mírame bien Itachi – me gritó.

- Ya te he visto, sólo eres una zorra a la que le gusta restregarse con todo el mundo, si no llego a entrar en ese local ahora mismo estarías en la cama de Naruto. Ya no eres el chico que me gustaba hace años, has perdido tu inocencia, tu dulzura, sólo queda... esta furcia que se enrolla con cualquiera. Pues lo lamento mucho por ti Sasuke, pero yo no voy a ser tu juguete, tengo novia y la quiero, conmigo no vuelvas a intentar restregarte.

Sasuke se quedó paralizado ante mis palabras. Sé que me había pasado pero estaba enfadado, no con él, en realidad no pensaba todo eso de él, le quería y me habría gustado haberle follado allí mismo en el bar o el coche, me daba lo mismo, sólo quería que Sasuke volviera a ser solamente mío, pero él... había cambiado, creía que podía controlarme y yo era un Uchiha, a mí nadie me controlaba, ni siquiera mi hermano. Estaba muy enfadado conmigo mismo por haberme dejado embaucar por sus encantos, por su duro carácter que se había forjado, por su arrogancia, su seguridad en sí mismo, Sasuke se había vuelto mucho más atractivo ahora que se hacía el difícil pero a la vez... te dejaba jugar para engancharte, era un maldito cabrón que daba y quitaba a su antojo para tenerte comiendo de su mano. Le habían enseñado bien a manipular a la gente.

El Probador (Yaoi; Naruto: Itachi-Sasuke)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora