Memorias de una fantsama©

1. ¿Por qué no podía haber sido una mañana normal?

Me desperté a las seis de la mañana con un ruido horrible perforándome mi pabellón auditivo, también conocido como oreja. ¡Ahggg que alguien pare ese maldito despertador!! Grité por dentro, mientras volvía a tumbarme y me ponía el cojín encima de la cabeza, pero nada, el incesante ruido no paraba. Al final tuve que levantarme de la cama e ir a apagarlo yo misma. Me estremecí ante el contacto de mis pies con el frio suelo, lo que no ayudo precisamente a reducir las ganas de volver a la cama. Mi cama, calentita y cómoda... sabéis que, unos minutos más de sueño no hacen daño a nadie.

Me desperté desorientada, una luz entraba por la ventana e iluminaba mi cuarto, caramba si que estaba sucio. Me levanté lentamente, aun dormida. A ver qué hora era..... ai mi madre, las siete y media, llegaba tarde, bueno, más bien llegaba MUY TARDE! Maldito despertador, se puede saber porque no había sonado, ya tengo razón ya cuando le digo a mi madre que no se puede confiar en estos chismes. Me levanté de un salto de la cama, cogí la primera ropa que encontré limpia, unos pantalones negros que parecían leggins y una camiseta de color amarillo gastado con el dibujo de una pluma, era mi preferida, fue el último regalo de mi padre antes que... No, ahora no podía pensar en eso o me volvería a echar a llorar. Me vestí rápidamente, la tela de la ropa estaba fría con el contraste de mi piel, pero la suavidad con la que resbalaba por ella me tranquilizaba, me recordaba cuando era más pequeña y mis padres me ayudaban a vestirme. Si me acuerdo de esa época, ¿ algún problema ? Fui rápidamente al baño para lavarme los dientes y mojarme con agua la cara. Eso sí que me ayudo a despertarme completamente. Corrí de vuelta a mi habitación, cogí la bolsa con los libros, me puse mis bambas deportivas negras y salí corriendo de casa. Eran las siete y cuarenta, y tenía que ir al instituto a pie y llegar antes de las 8. ¿ Podía hacerlo, no ? Me puse a correr por las calles como una loca poseída perseguida por un asesino, bueno quizás más bien por la policía. A por cierto que aún no os he contado nada, me llamo Lidia, pero que sepáis que cuando lo digas, escribís o pensáis, que sea Lydia. ¿ Qué por qué con y y no con i latina ? Pues muy sencillo. Lidia me gusta como nombre, pero es muy común y yo no soy ni pienso ser nunca una persona común. Las personas comunes y sus vidas son aburridas, además mis gustos tampoco son muy comunes que digamos, así que recordad Lydia con y. Tengo 17 años y este año será mi penúltimo año de instituto antes de ir a la universidad, y es por eso que no quiero ser una persona, bueno especificando, una chica común. Porqué casi todas las chicas de mi instituto y de mi curso, eran tratadas como simples juguetes por los chicos "populares". Y yo tenía mi orgullo y mi dignidad, y no pensaba ser como ellas. ¿ Que como soy físicamente ? Pues bueno, lo normal. No soy ni muy fea ni muy guapa, lo que me había permitido pasar desapercibida todos estos años en el instituto, bueno eso y una ayudita extra que ya os contaré mas tarde. Soy un poco bajita, pero no mucho, tengo el pelo largo y rizado por la parte de las puntas, de color marrón oscuro. La verdad es que mi pelo es lo único que me gusta de mí. Tengo la cara redondita, los ojos de color marrón, nada fuera del otro mundo. Y no estoy ni muy delgada ni muy gorda. Lo dicho, nada fuera de lo común. Pero así estaba bien, ya había descubierto en estos años de instituto que llevaba aquí que como menos llamabas la atención mejor te iba todo. Prácticamente era una fantasma para casi todo el mundo, menos para mi mejor amiga, Ash. En verdad se llamaba Ashley Brown, pero yo siempre le llamaba Ash porqué ella siempre me llamaba Lyd, era una cosa entre nosotras. Solo nos llamaban así los amigos más íntimos, y como solo teníamos un mejor amigo íntimo cada una, pues solo nos llamábamos así entre nosotras. Se entiende no, o sea que ella solo me tenía a mí y yo a ella, éramos nuestras mismas amigas íntimas. La verdad es que no sé qué sería sin ella, de verdad que no lo sé. ¿ Qué más puedo contaros ? Doy clase a alumnos más pequeños y hasta gente de mi propio año en casi todo. Al principio me negué ante la idea, porqué me ponía muy nerviosa y siempre tenía miedo de equivocarme y que perjudicara al alumno, pero al final tuve que hacerlo por dos razones. Primero porque necesitaba el dinero, y segundo porque Ash no me dejó otra opción. Empecé ayudando a una amiga de su hermana pequeña de primer curso, y la verdad es que no me fue mal. Al final aprobó la materia con sobresaliente. Así que ella hizo correr la voz y me encontró otros alumnos que ayudar, ya veis que encanto, adoro a esa niña, i a través de esos alumnos pequeños, la información pasó a los hermanos mayores, y dentro de poco tiempo me salían personas a las que ayudar en bastantes sitios. Fue increíble. Ahora ya me he acostumbrado bastante a todo, pero aún me pongo nerviosa cuando no me sale un ejercicio. Sobre todo cuando los hermanos y si, hermanas también, de los pequeños ligan conmigo cuando voy a su casa para hacer la clase. De verdad que eso me mata, ¿ es que no tienen vergüenza o qué ? Sobre tema novios, he tenido un par en la vida, pero nunca nada serio. He tenido primer beso y tal y si, antes de que preguntéis, soy virgen. Tengo muy claro que no pienso ser como las zorr.... Digo las chicas de mi instituto, que visten con ropa que parecen solo trocitos de lo que fue en un principio la pieza de ropa y que fuman y se meten en problemas solo para llamar la atención de los chicos. Es en serio, que sentido le ven a arruinar su vida solo por un chico que no les considera más que un juguete que pueden tener al alcance de su mano cuando quieran, ¿ de que sirve destruir tu vida con drogas solo por tíos que te ven como una más ? De acuerdo que hay tíos que están muy, pero que muy buenos en el instituto, ¿ pero para llegar a ese extremo ? Yo no le veo la lógica la verdad. Por eso no quiero ser común y por eso sigo siendo virgen, no porqué no haya tenido oportunidad de cambiar eso, estoy segura que si coqueteas un poco con el primer chico que encuentres te ayuda encantado, pero no pienso entregarle mi virginidad a un chico que no le importo para nada, eso seguro. Sobre mi familia tengo a un hermano cuatro años mayor que yo y a mi madre. No necesito a nadie más. Y eso es todo. Al fin, ya veo el colegio, joder todo el cuerpo me quema del esfuerzo y casi no puedo ni respirar. ¡ Hasta estoy sudando por sitios que nunca imaginé que se podía sudar !! Nunca, nunca más en mi vida volveré a hacer esto. Espero que no se me acerque ningún imbécil descerebrado, también conocido como chico por otras personas, porqué estoy que muerdo. Ya casi no sentía la planta de los pies, pero ya casi llegaba. Solo un poco más Lyd, un último esfuerzo. Llegué al colegio justo después de que se apagara el sonido del timbre. Si me daba prisa aún llegaba a tiempo. Ya estaba bastante cabreada, como para tener que soportar a un profesor echándome la lata con que había llegado tarde. Entré caminando/corriendo por el pasillo, pensando en mis cosas cuando oí un silbido y una voz que lo seguía diciendo: