EL INSTITUTO

1 mi comienzo en el instituto

BLOQUE A: SENTIMIENTOS ENCONTRADOS

LIZBETH

-no quiero ir papá dije de forma firme y directa.
-te toca hija, te toca ir porque siento que no estas lista para ir a la universidad.
-papá tengo 16 años, puedo tomar mis propias desiciones.

Desde que mi madre murió he tenido que soportar a mi padre sobreprotector y ya no me da tanta libertad como la tenía antes, él quiere que asista a una clase de instituto donde me preparan para ir a la universidad- papá pero yo ya me siento lista!-le daba razones pero el no me escuchaba, al fin y al cabo despues de 2 dias me ignoró hasta la tarde y entonces acordamos que teníamos que hablar en la noche para arreglar todo.

-y entonces que decides?-dijo mi papa levantando una ceja, recogiendose de hombros.
-bien, voy a ir- dije con poco agrado, su idea no es que me gustara mucho pero mejor asisto antes de que se niegue a pagar mi carrera universitaria-pero recuerda bien, si no me gusta en los primeros 3 meses dejo de ir entiendes?.

-si- dijo el con mucho agrado, tenía tiempo que no lo veía tan emocionado, llevaba puesta una camisa rosada y una vermuda verde menta que le llegaba por debajo de las rodillas, cuando se vestíade esa forma significaba que era su dia de triunfo, por alguna razon se me hacia que él ya sabía que yo iba a asistir a ese maldito instituto, pero quién sabe?, quizas me guste.

■■■■■■

Por desgracia yo ya estaba en camino al maldito instituto, quedaba sólo a unas 7 cuadras de mi casa, no era tan lejos-al menos tiene algo de bueno- me dije a mi misma. Un tiempo despues al irme acercando más al instituto ví a mucha gente de mi edad entrando de forma natural aunque fuese sólo el primer dia- sí!! No tienen uniforme!!!-grité, por lo tanto una chica me preguntó -primer día ?-me dijo con cara divertida, esta era una chica de piel blanca, cabello rubio y unos ojos azul claro.

-si- le respondi rápidamente.
-yo podria guiarte, si quieres
-claro, no hay ningun problema
-genial, sígueme.

Realizé lo que ella me dijo y pude ver que el instituto por dentro no era como me lo imaginaba, tenia grandes pasillos, diversos ascensores y escaleras-cual es tu nombre por cierto?-le pregunte con voz seria

-me llamo elena y tu?-me dijo de una forma curiosa.
-mi nombre es lizbeth pero puedes llamarme liz, no importa mucho la verdad- le dije recogiendome de hombros, me miró sorprendida por alguna extraña razón y cuando quise notarlo, yo ya estaba tirada en el piso-maldición papá tu ocasionas todo esto- dije y luego escuche una pequeña risa-te causa gracia elena?- la mire y ella estaba lo mas de seria con una clase de mueca en la boca.

-yo no me he reído, haces ejercicio?, porque no parece que hallas notado el peso sobre tu espalda-la mire extrañada y de repente senti de lo que ella hablaba.

-quitate de encima si quieres quedar con dientes!- grite al notar que era una persona encima de mi. Aquella persona se levantó, era un chico alto, con una complexión normal, un cabello rubio y unos ojos azules, de piel blanca tostada y por desgracia un gran peso provocado por la altura.

Aquella persona con risa de niñita se levantó rápidamente y me dio una sonrisa despues de ayudarme a levantar.

-perdón, es que venía corriendo distraído- me dijo de una forma informal- me llamo christopher, y tú?-cerré los ojos por un leve momento mientras me acomodabá la ropa.

-Yo, me llamo lizbeth, un gusto.
- lo mismo digo- me dice de una forma despreocupada mientras se rascaba la nuca con la mano.

Ya comencé el instituto con un putaso en la cabeza, *maldicion*

-y entonces, estas bien?-preguntó de igual manera
-sí-respondí con seriedad y desagrado en la boca, el rodó su mirada y luego vio a elena para después poner una sonrisa en la cara, al verlo elena puso una cara de pocos amigos.

-qué demonios quieres ahora?- elena a simple vista parecía una niña dulce con su cara un poco redondeada sus ojos claros y su cabello rubio con rizos en puntas, pero al hablar solo un rato con ella notabas enseguida que es bastante temperamental.

-ya se conocen?- pregunté con curiosidad.

-sí, por desgracia- respondio ella, él volvió a sonreír y se cruzó de brazos volteando su rostro sólo por un brebe momento riéndose- este me ha venido molestando desde hace 2 años en el instituto- dijo con una sonrisa falsa demasiado obvia, la cual me hizo entender que lo había hecho a propósito.

Para liberar tension el sonrió
-lo siento sí?este año no te molestaré, lo prometo- dijo y se fue con una sonrisa en la cara luego de mirarme

-qué le pasa?, siempre es así?-pregunté

-sí, por desgracia, sus padres viajan a austria constantemente por largos tiempos y él queda solo en su casa haciendo lo que le venga en gana la mayor parte del año.

****

Despues de seguir conversando me fui a la oficina de la rectora para notificarle que había decidido entrar, ella me recibió con mucho agrado, la mujer era de cabello marron y una piel extremadamente blanca, con unos labios delgados y finos de un color muy rosado, era delgada y alta con unos ojos marrones que combinaban con su cabello. Parecia ser una persona seria y de caracter.

-bueno seas bienvenida, mi nombre es sophie. Y como tu rectora exijo que vayas a clases ahora mismo, matemáticas, segundo pasillo a la izquierda tercer salon, ¡YA!

Y ERA COMO ME LO IMAGINÉ.
Fui como ella me lo indicó y entre al salon, el profesor no había llegado y al avanzar un poco noté que había un puesto vacío para mi, y adivinen qué?este estaba al lado de elena y delante de chris, coincidencia?, no lo creo, elena apreto la boca, cerró los ojos y negó con la cabeza. Yo me senté ignorando a todos execto a elena pero cabe anotar que el estúpido de chris no paraba de mirarnos como estúpido mientras se le escapaba una que otra risilla de niña, mis días aquí iban a ser dificiles, puedo deducir que este tipo me hará la vida imposible si lo que elena me dijo es cierto.

Maldición, espero no tener razón.

Chritopher maslow, multimedia.