EL INSTITUTO

46 CELOS

Christopher

Buen comienzo no? Matias y grabiela nos acompañaban a liz y a mí en la cafetería.

-y entonces a bruselas?-preguntó liz moviendo la pajilla de su café.

-sip

-con que se come?-preguntó matias.

-es la cpital de Bélgica si estoy en lo correcto-le respondí al instante, grabiela dio un sorbo a su gaseosa.

-y viajas mañana a primera hora?

-sip....genial no? Y creo que mis padres viajarán de nuevo cuando yo vuelva.

-en serio? Y cuando regresan?-preguntó liz.

-en julio del siguiente año.

-a donde van?

-australia como de constumbre.

-bien-gruño matias-ahora hablemos de algo que si sea de mi interés porfavor!liz y yo nos detuvimos al oír el comentario y grabiela le hizo ceñas a matias de que callara.

-liz dice que no es celosa-murmuré.

-que?-preguntó grabiela, matias sonrió y liz sostenía su cabeza con la mano en el mentón y el codo en la mesa.

-no lo soy.

-si lo eres! Y voy a demostrarlo-reí yo.

-suerte con eso-defendio grabiela a liz y se levantó del asiento-ella no es celosa, para nada...tu en cambio-me miró desde el torzo hacia arriba con una mano levantada a la altura de su hombro el cual estaba escondido por telas de una blusa roja de encaje-bueno.....la celas hasta con otras mujeres-una vez dicho eso se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia la salida de la cafetería.

-muy bien....todos me dan la razon-dijo lizbeth, yo hice una mueca y matias acudió a nosotros tan rápido que ni siquiera yo había alcanzado a pensar en mi respuesta.

-todas las mujeres son celosas!

-eso es un prejuicio-gruñó liz.

-no, no lo es-matias siguió defendiéndose-y lo digo por empirismo, todas las mujeres son celosas, solo que muchas lo esconden y nadien lo nota, sabes que hacer, no chris?

-si-continúe yo-lizbeth kent, te reto a demostrar que no eres celosa.

-no puedes besar a nadien.

-coquetear?

-tal vez.

-asercarme mucho?

-no demasiado pero si.

-mirar por donde no devo?

-esa es desicion tuya pero si lo haces con migo da daría un buen golpe.

-y que tal si lo hago?

-le diré a la otra persona lo que hiciste.

-y si es un hombre?

-le diré de todas formas y ugh-reí.

-trabajo hecho, adiós-matias se levantó de la mesa y luego se fue dejandonos a los 2 solos de nuevo.

-no creo que dures mucho-murmuré, para mi se estaba volviendo un hábito.

-ya lo veremos-correspondió ella, se acomodó en la silla y elena y wales se sentaron junto a ella, instintivamente bajé la mirada y puse mis manos entrelazadas sobre la mesa.

-liz, el dice que yo timé su teléfono.

-y yo...tengo que....-alargó liz confundida.

-dile que no...haber si así me cree.