Untitled Part 5

184 14 7
                                        

A la mañana siguiente Shinji se despertó con los rayos del sol tocándole la cara. Había dormido bastante bien para variar Misato no estaba en el departamento, pensaba Shinji que se había ido a trabajar. Lo más raro de todo es que no había ni una nota que era las que generalmente ella dejaba. Sin más Shinji prendió la televisión y se puso a buscar cualquier cosa en la televisión. Ya no había buenas películas, ni series de comedia como la de Friends, en su lugar había puras graficas sobre cómo la población se iba disminuyendo. Harto de ver tantas muertes, Shinji apagó la televisión y se puso a leer El beso de la mujer araña de Manuel Puig, estaba tan concentrado que no vio en ese momento como su padre entraba a la puerta de su casa y se le quedaba viendo enfrente de él. Shinji al ver una sombra que le tapaba la lectura, volteo hacía arriba y vio a su padre mirándolo con el ceño fruncido. Shinji se asustó de verlo y se tambaleo un poco.

- ¿Qué haces aquí?

- Shinji. Necesito que vengas conmigo.

- ¿por qué? Preguntó Shinji completamente complejo.

- Tiene que ver con Misato y Asuka.

- ¿Misato, Asuka están bien?

Sin recibir respuesta alguna, el padre tomó a su hijo del brazo y lo llevó a una limosina de color negro. Adentro había varios hombres vestidos de traje, Shinji pedía que le respondieran qué estaba pasando pero no recibió respuesta alguna. Tampoco su padre se atrevió a dirigirle la palabra, durante todo el trayecto Shinji pudo escuchar a varios hombres y mujeres gritando desconsoladamente. El muchacho peli-castaño se tapó los oídos, oír a cientos de personas llorando y gritando lo ponía bastante nervioso era una ventaja que la limosina estuviera completamente a oscuras ya que no tenía que ver los rostros de los hombres, mujeres, ancianos y niños llorando. Finalmente aquellos llantos cesaron, suponía Shinji que estaban en la carretera ya que no había ni un rastro de humanidad ni sollozos. El trayecto era bastante largo, Shinji pestañeó varias veces aunque trataba de hacer un esfuerzo por no quedarse dormido el cuerpo pudo más y Shinji quedó profundamente dormido hasta que su padre dándole un pellizco lo despertó.

- Ya despierta.

Shinji así lo hizo, el carro se detuvo en lo que parecía ser una enorme instalación científica había muchos camiones, hombres vestidos con trajes especiales con mascarillas atemorizantes, también había varias tiendas de campaña afuera de las instalaciones. El joven muchacho siguió a su padre y a su sequito de hombres pasando por las instalaciones. A través de las tienda de campaña, Shinji fue testigo de los enfermos. Se trataba de gente que le salían ronchas similares a la lepra, Shinji pudo ver como a un hombre se le deformaba la mano derecha, un niño al que le amputaban un brazo y una pierna a causa de las ronchas y una muchacha joven que sollozaba "no me mates" "aún soy virgen". Una fosa con millones de cadáveres de hombres, mujeres y niños a los que se les prendía fuego lo que imanaba un olor que era indescriptible.


Al ver tanta gente en tan mal estado a Shinji se le retorció el estómago y a medio camino vomitó. Su padre volteo a verlo con suma indiferencia como si lo que acabará de hacer su hijo fuera solamente una rabieta infantil. Cuando el muchacho se hubo recuperado entraron a las instalaciones de Nerv. Era un enorme pasillo con varias máquinas extrañas y vitrinas donde experimentaban con monos, gatos y perros. Los científicos estaban vestidos con sus clásicas batas blancas y una mascarilla. Después de caminar por el tan largo pasillo, Gendo se metió en una pequeña puerta hecha a base de vidrio. La oficina de su padre consistía de un largo pasillo alargado el cual estaba hecho a base de un lago en el que se podían ver los peses Koi a lo lejos del pasillo estaba su escritorio y una figura a la que Shinji reconoció inmediatamente.

AntígonaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora