Una adolescente en peligro de amor

Te necesito sin culpas

Necesitaba a alguien que ma haga sentir viva en sus brazos, necesitaba conocer gente nueva.
Ahí fue cuando conocí a Esteban. Un chico noble, lindo, con una mirada igual a la de un niño, inocente, perfecto.
Me olvidé del mundo por un segundo y comenzé a pensar en él, fue mágico.
Le hablé por chat, no sabía que me iría tan bien. Hablabamos todo el día, cada palabra encajaba en su lugar. Era cada vez más interesante conocerlo y aprender de él, era sin duda un moledo a seguir.
Yo lo había visto varias veces, pero nunca habíamos hablado en persona.
Un día me fue a ver a mi lugar de estudios. Yo estaba muy nerviosa, pero él me sonreía de lejos, no hablamos.
Al día siguiente me sentí culpable, él había ido solo para verme y yo lo había ignorado. Así que le hablé por chat, otra vez y quedé en ir á buscarlo yo.
Quedamos en vernos en un parque, lo saludé y comenzó todo...
Su mirada volvió a derretirme en él. Hablabamos de todo un poco, él era muy divertido. Tenía una hermosa sonrisa y unos olluelos cuando sonreía que eran tan tiernos.
Me contaba sobre su familia, sobre él y sobre qué le gusta. Yo le hablé de mis deseos, de mis sueños, de mis penas, de mis alegrías, era muy sencillo hablar con él.
Me lo tomé con calma, bien dicen "Si quieres cambio verdadero pues camina distinto", pues bien, ya era hora de calmarme y esperar lo mejor sólo que esta vez dejaré que todo siga su paso...