Capítulo 41- Cambio de trato

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- ¿Al baile? Claro.

-Gracias, gracias, gracias, gracias. -le abrazo y enseguida me separo por la hiperactividad que noto en estos momentos, no sé qué seria esa mirada, pero en estos momentos no estoy para preguntar cosas.

-Intentare que mi padre no se entere, pero no te prometo nada, ¿Vale?

-Vale, ¿Qué hay de cena? Tengo hambre.

-Tortilla, ¿te apetece de algo en especial?

-Mmmm... de cualquier cosa.

-Vale, pues enseguida la hago.

-Te ayudo. -hacemos la cena y cuando nos sentamos para cenar Daemon me mira.

-Oye, siento lo del viernes...

- ¡Daemon! ¡Deja de culparte ya! No hiciste nada, fue tu padre.

-Tenía que haberte avisado.

-Estabas inconsciente.

-Me da igual, se supone que yo cuido de ti, no al revés.

-No va a pasar nada porque alguna vez te cuide yo a ti, eres humano, no intentes hacer cosas así, porque sales herido.

-Ali, me da igual salir herido y lo sabes, lo que pasa es que no quiero que mi padre te haga daño...

-Tranquilo Daemon, no tienes que sentirte mal.

- ¿Y si te llega a haber hecho algo?

- ¡Pero no me ha hecho nada!-se queda con la boca cerrada, sin decir nada y sin moverse siquiera, sonrío satisfecha, no puede replicarme.

-No volverá a pasar. -bueno, nada menos eso.

-No hace falta que me estés protegiendo todo el rato.

-Ali, mi padre es capaz de cosas horribles, y no quiero que te haga nada.

-Me voy a dormir...-subo a mi cuarto sin terminar de cenar, de repente todo el hambre que tenia se ha esfumado, me cambio al pijama y me tumbo en la cama, caigo dormida enseguida.

Por la mañana me despierto antes de que Daemon venga a despertarme, me cambio con una de las muchas prendas de ropa que me compre ayer, y bajo, Daemon aun esta haciéndose su propio desayuno, me mira, algo sorprendido.

-Buenos días madrugadora.

-Buenos días. -bajo completamente las escaleras para que me vea con la ropa nueva, quiero saber su opinión.

-Menudo cambio.

-Lo sé...-miro al suelo, desanimada, creo que no le gusta, este no es mi estilo, no me gusta ir así, y si para colmo me dicen que no me queda bien...

- ¿Por qué te desanimas? No es lo que llevas habitualmente, pero estas preciosa. -me sonrojo un poco y me acerco a la barra, me apoyo en la misma y miro a Daemon.

-Cállate, no me gusta esta ropa. -lo que he pensado y lo que he dicho son pensamientos completamente contradictorios, quería que me dijese que me queda bien, pero cuando me lo dice le mando callar... ¿Qué me pasa?

- ¿Te hago tortitas?

-Sí, por favor. -me hace las tortitas y yo me las cómo como si fuese un manjar digno de reyes y reinas, termino y le doy un beso en la mejilla a Daemon, cojo mi mochila y me voy.

Nada más entrar al instituto las miradas de unos cuantos chicos se posan en mí, haciéndome sentir incomoda, miro al suelo y voy a mi taquilla, la baro y pronto llega Jay.

- ¿Qué te ha pasado?

-Chris y Lena...

- ¿Cuánto tiempo?

Yo soy la asesinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora