Un amor de YouTuber's (Sebastián Villalobos)

Capitulo 4 .-Satisfacción.

"Sebastián's Pont of View"

Joder no dejaba de pensar en Sam, por su voz cuando contesto el teléfono.

¿La interrumpí cuando estaba con otro hombre?

¿Hacia lo mismo que yo hacia?
¿Me está engañando?

La verdad no se que pensar, ella me ah de ver ya superado. ¿Por qué no? Si yo no hago nada para comunicarme con ella, me vale lo que haga ahora, no se ahora por que me comporto así. Lo único que me preocupa es Isabela, mi pequeña princesa.

- ¿En que piensas, mi amor-Amanda hizo que salga de mis pensamientos, negué levemente.

-Pensaba en como estaría mi hija-Le di una sonrisa cálida, la cogí de la cintura y la senté en mis piernas.

-Solo preguntaba ¿La extrañas? -Preguntó, pude ver en sus preciosos ojos una pizca de curiosidad.

-Como tienes idea, también me pregunto si Sam, sigue en esas peleas-Dije sin pensarlo.

- ¡Ya quisieras! ¡Tiene 26 años! ¡Esta vieja, para mover mucho sus músculos!-Río, le seguí el juego, aunque tiene razón ella ya no a de ser la misma de antes, a de ver madurado, ser una mujer independiente, a de estar gorda de tanto comer. Hice una mueca de asco, al pensar en eso, escuché la risa de Amanda, la mire confundido.

- ¿Qué?-Pregunté, ella negó rápidamente, achine mis ojos para ver si no me mentía.

-Esta bien -Se rindió, sonreí triunfante- La cara que pusiste me hizo reír, nada mas. -Dijo ella sonriéndome, buena chica.

-Okay, para la próxima deja de ser una perra, y no contarme -Dije con una sonrisa, ella negó rápidamente.

-Pero fue algo insignificante -Protestó con los brazos cruzados.

-No me interesa, por mas mínimo que sea, me cuentas -Dije mirándola.

(...)

Ya era de noche estábamos en los ángeles, en un hotel lujoso. Sentí las ganas de llamar a Sam y preguntarle por que contesto así. Pero mi subconsciente me lo impedía. Abracé a la pelinegra que estaba ya dormida, me acurruque en su cuello, esperando a que viniera el sueño.

"Sam's Point of View"

Escuche como alguien tosió falsamente, haciendo que reaccionará, lo mire con una sonrisa, él me devolvió el gesto.

-Ven aquí.-Dijo abriendo sus brazos, no dude en acercarme, enrollando mis pequeños brazos a su torso, él también hizo lo mismo, pero mas fuerte. Me transmitía paz, tranquilidad. Lo que Sebastián me hacia sentir. (...) Llegue por fin a la casa cansada como siempre.

- ¡Llegué! -Grité, avisándole al que se encuentre en la casa. Escuche pasitos acelerados bajando por las escaleras, dejando ver a una niña con pijama, corrió hacia mi con sus pequeños brazos a abiertos.

- ¡Mami!-Dijo feliz, le beso su mejilla.

-Hola, mi amor-Le sonreí, escuche que alguien secaba los platos. Fui a la cocina con Isabela, la vi allí parada, mi madre con una sonrisa de hipócrita, joder mi sangre hervía.

- ¿Qué haces aquí? -Escupí, mientras me cruzaba de brazos. Ella soltó una risita, bastante desagradable.

- ¿Qué crees que hago aquí?-Preguntó, abrí mi boca para responder pero ella se adelanto-Vine a visitar a mi nieta. ¿Verdad, bebé?-Le preguntó a mi hija. Me acerque, mientras la acorralaba, asustándola por mi comportamiento.

-Le pones un dedo encima a mi hija, eres mujer muerta -Escupí con rabia, ella no tiene ni un maldito derecho de venir aquí, de paso a entrar, ella se asusto mas cuando dije esas palabras.

-No te atreverías-Dijo firmé, solté una risa amarga.

-No me retes, por que juró que lo haría-Musité, mientras la cogía del brazo bruscamente.

La lleve hasta afuera de la casa empujándola, ella se dio la vuelta, iba a hablar antes de que lo hiciera le cerré la puerta en la cara. Eso hizo que sintiera... Satisfacción.

Créditos: SoyUnaLlamaKawaii