Hospital «Shawn Mendes»

Capítulo 12

No me podía dormir, tenía tantas cosas en las cual pensar que mi cabeza no daba para más en la situación. 

Mamá y papá no se pudieron quedar esta noche conmigo en el hospital, por lo que estoy completamente sola en esa habitación fría. Me senté en la camilla y coloqué mis pies en el suelo, me estremecí al sentir lo frío que estaba bajo mis pies. Tomé una linterna que me había dado Brooke para la búsqueda del tesoro que haríamos mañana por la noche y caminé hasta la puerta. Esta rechinó un poco y no la quise abrir más, me escabullí entre medio y salí. 

Daba miedo los pasillos del hospital cuando todo estaba oscuro, por lo que rápidamente fui hasta el ascensor y marqué el último piso.

Al salir afuera del edificio, el helado viento de la noche me golpeó la cara y caminé hasta poder ver toda la ciudad. Respiré hondo y me puse a analizar la situación en la que me encontraba. Externamente a los amigos que he hecho aquí, mi situación tanto como psicológica y física está mal. Hace más de una semana que tuve un terrible accidente automovilístico, que solo nos perjudicó a mi y a mi hermana. 

Nicole.

Todavía siento la presión en el pecho al recordarla, no sé por qué diablos mis padres no me han dicho su situación todavía. ¿Qué tan malo podría ser? Sé que no está muerta, que es eso algo muy bueno, y mi cabeza no para de crear hipótesis sobre su situación corporal, pero necesito la verdadera. 

Miré nuevamente hacia la ciudad y mi campo de visión se desvió hacia abajo, la calle principal donde se encontraba el hospital, algunos autos pasaban y ambulancias. Fruncí el ceño y me subí hasta quedar a un paso de caer al vacío. Nunca entendí por qué las chicas y chicos tenían la necesidad de acabar con sus vidas, pero ahora los entiendo. La vida les da mucho dolor del que pueden soportar. O eso creen ellos. Me acerqué más a la orilla sintiendo como el viento chocaba con mi cara y sonreí. Quizás esta sea la última vez que sienta la brisa sobre mí, o la última vez que tocaré a alguien, o la última vez que escuche mi propia risa. Quizás Dios me ha dado esta oportunidad para ir con él a un lugar mejor, aquí solo puedo sufrir sin más.

"—¿Cómo estuvo tu primer día de universidad, Nicole?— preguntó mamá mientras veía a mi hermana pasar la puerta de la cocina con una expresión cansada. Dejó sus libros en la mesa y fue a abrazar a mamá. Se dejó caer en sus brazos y mamá gritó mientras se reía. —¡Nicole!

—Es muy agotadooor, ya un día en la universidad y extraño la escuela— se quejó y sonreí. Chocamos puños en forma de saludo y se sentó a mi lado. —Los profesores me odian, mis compañeras son todas unas degeneradas y los chicos con las hormonas a flor de piel— bufó.

—Tranquila, mandril. Mañana será un día mejor— la animé y ella levantó la cabeza para mirarme indignada. Untó su dedo en la crema del trozo de pastel que me estaba comiendo y me manchó la nariz. —¡Hey!

—Niñas, niñas— sonrió mamá y  me metí otra cucharada de pastel a la boca inflando los cachetes y burlándome de Nicole."

"Sonreí al público mientras una señorita ponía en mi cuello una medalla de segundo lugar en un concurso nacional de arte. Mi padre, mi mamá y mi hermana estaban de pie en el público mientras me sonreían y no podría estar más orgullosa de mi duro trabajo. Todas las noches, por una semana, Nicole se quedaba conmigo hasta las cuatro de la madrugada para poder terminar el cuadro que me habían asignado. Ahora ver su sonrisa de orgullo me pone tan feliz que podría llorar."

Una lágrima se resbaló por mi mejilla y me fui acercando más y más a la orilla. Me dolía el pecho y solo quería que esta situación acabara. Di un paso más y luego sentí como caía.

Abrí los ojos y estaba tirada de espaldas en el piso. Mi corazón iba a mil por hora y me levanté nerviosa, me acerqué a la orilla y miré hacia abajo, todo seguía completamente normal y no había ninguna señal de que una chica se había suicidado saltando del último piso de un edificio. Me agarré el cabello con frustración y tenía ganas de gritar. ¿De veras se me había pasado por la cabeza suicidarme? ¿Era yo quien estaba pensando o solo el lado del dolor?

Me alejé de la orilla de la baranda como si me quemara y corrí hasta estar de nuevo dentro del edificio. Mi expresión de terror se reflejó en el vidrio de la puerta de entrada y toqué mi rostro.

Aléjate de la orilla, Marie, no lo hagas.

Aún con la respiración a mil, corrí hasta las escaleras y las bajé tan rápido como pude, lo único que quería era llegar a mi habitación y encerrarme ahí para no salir nunca.

En un estúpido movimiento, mi pie choca con el escalón de abajo y grito de dolor mientras mi cuerpo golpea con las escaleras hasta detenerme por completo. Mi alarido resonó por todo el edificio y comencé a llorar pidiendo a gritos ayuda. Toqué mi cadera y luego mi mano quedó húmeda, seguramente es sangre, pero no podía distinguirlo bien ya que todo estaba oscuro.

—¡Ayuda, por favor!— volví a gritar mientras lloraba de dolor. 

El dolor provenía de mi lado izquierdo del cuerpo, pero más de mi cabeza, aún no puedo asimilar que estuve a punto de saltar de nueve pisos.

Shawn

Volví a oler la flor que compré en las afueras del hospital para Marie y sonreí. A ella le va a encantar. Caminé hasta el ascensor y esperé a que llegara. En su interior habían otras dos enfermeras que tenían caras de preocupación, y quien no la llevaría si trabajara en un hospital donde lo único que se escuchan en los pasillos son más y más desgracias. 

—Dicen que estuvo en el noveno piso a las once de la noche, y luego, por la oscuridad, tropezó en las escaleras...— dijo una y escuché con atención.

—¿Qué diablos estaba haciendo allá?

—No lo sé, nadie lo sabe.

— Clarisse debe estar muy preocupada— negó una enfermera con la cabeza.

¿Clarisse?

Preocupado, me bajé en el piso de las chicas y caminé con el ceño fruncido hasta estar afuera de la habitación de Marie. Me asomé en la ventana y no había absolutamente nadie dentro. Me giré desesperado buscando a la chica hasta que mi mirada se encontró con la de Clarisse, su enfermera y la mía también.

—¿Dónde está ella?— la tomé de los hombros.

—Shawn...— me advirtió y mordí mi labio inferior nervioso. —Anda a tu habitación, no puedo darte nada de información ahora— me indicó con el dedo y abrí la boca para contestar. —Nada de peros, me vas a obedecer, y esta vez te vas a ir a tu habitación— me miró seria y agaché la cabeza ocultando mi mirada. Me giré y recogí la flor que había caído al suelo, me puse delante del ascensor y miré hacia Clarisse, asintió con la cabeza y el ascensor llegó, vi como Clarisse desaparecía de mi vista y corrí en dirección contraria a ella. Iría a las habitaciones para pacientes recién operados.

N/A ¡holaaaaa!

añoss sin actualizar, deoh meoh. 

pero estoyy de vueltaaa, y este viernes salgo de vacaciones de veraaano, y tendré tres hermosos meses para poder escribir lo que yo quieraaaa.

espero que les haya gustado el capítulo y comenteen para el próximo:)

cambié a la protagonistaa, haha, ahora será Maggie Duran, la chica que está en la portada, bc lily collins está muy repetida,bro ;-;

bueno, eso era, adioh✌

Aleex.