Resistiendo.

¿Porqué lo ocultaste?

[KLAUS]

Era el momento. Debía decírselo, sabía que podía confiar en ella, nunca haría algo para lastimar a mi hija. Era alma pura, y aunque Caroline había cometido errores, no volvería a hacerlo, yo lo sabía pues confiaba en ella. Sentía una gran necesidad de contárselo, de rebelarle mi más valioso y preciado tesoro en el mudndo. El regalo más grande que la naturaleza me había podido dar. Una hija.

-Amor, lo que estoy a punto de decirte puede cambiar tu perspectiva, o tus pensamientos. Y estás en todo tu derecho de enojarte, y no querer volver a verme jamás, si así lo deseas.-No sabía qué esperar como reacción de ella.

-¿Qué es lo que pasa?, me pones nerviosa.- Su cara parecía ansiosa, en realidad era yo quien estaba nervioso.

-Para empezar todo... ¿Recuerdas a Hayley? la amiga de Tyler-.

-Claro-.

-Bueno, ella se había metido en problemas con Katherine y la mandó a matar con un vampiro. Hayley me pidió que la protegiera a cambio de información sobre Katerina. Se quedó en mi casa, después de varios tragos, una cosa llevó a la otra y...-Tomé aire.- Terminé acostándome con ella.

-Wow, ¿qué?.-Su cara parecía sorprendida, pero no enojada. Era algo extraña [se acuerdan cuando care le dijo a elena/katherine lo de Klaus y ella y la cara que puso? bueno, así más o menos la cara de Caroline :v].- Lo siento, esque, no lo proceso... Wow, ¿enserio?-.

-Sí amor, pero no es lo fundamental de la historia. La primera vez que regresé aquí, un poco antes de tu graduación, fue porque me había llegado el rumor de que unas brujas conspiraban contra mí, así que decidí averiguar de qué se trataba. Mi hermano Elijah llegó a la ciudad para ayudarme en el asunto, y cuando finalmente averigué lo que pasaba, me llevé la sorpresa más grande de mi vida. Algo que en ningún momento llegué a imaginar que pasaría, porque según a todo esto no era posible.-Estaba nervioso, más que en algún otro momento del día. Podría vomitar incluso, no quería soltarlo, pero ya era demasiado tarde.

-Klaus, ya dime qué sucede me estás asustando-.

-Hayley. Ella... estaba embarazada, de mí.-Lo había soltado, me sentía un poco libre. No me había dado cuenta de la expresión de Caroline, parecía molesta, como si no lo creyera.

-Klaus, ¿esperas que te crea? ¿enserio?, los vampiros no pueden procrear.- La interrumpí.

-Pero los lobos sí. Soy el Híbrido Original, el primero de mi especie. La magia me hizo vampiro pero nací como licántropo.- Su gesto cambió, como si para ella todo comenzara a tener sentido, y en verdad la entendía, yo pasé su situación. Exactamente igual. Creía que bromeaban. No dijo nada y decidí continuar.-Las brujas la tenían porque querían que yo ayudara en un plan de rebelionismo a cambio de dejar vivir a Hayley. Como podrás imaginar, lo primero que dije fue que no me importaba, que por mí podían matarlos a los 2, pero después de que mi hermano el noble Elijah me hiciera reflexionar, lo pensé, y dije, ¿porqué no?, así que terminé aceptando el trato.

[CAROLINE]

No podía creerlo. No. No. No. No. Era broma. Sí, eso debía ser. Una buena broma. En unos momentos nos estaríamos riendo de eso. Reacciona Caroline. Mi voz interna hablaba, me decía que todo era verdad. Esque, ¿porqué él?. ¿Porqué me ponía así?, yo no podía estar celosa. Era su vida, además, él y yo nunca tuvimos nada serio u oficial. Dormí con él, sí, pero fue sólo es... Aguarda Caroline, has cuentas. Comencé a hacerlo. A realizar cuentas mentales. A recordar fechas. Llegué a una conclusión. Mi cara cambió inmediatamente. Levanté la mirada y lo ví a los ojos, con algo de desprecio. Estaba molesta. Parte de mí sabía que era porque me dolía. Me dolía que me haya mentido, y me haya ocutltado algo de tan suma importancia la última vez que nos vimos. La última vez que nos vimos, él esperaba un bebé y me acosté con él. Y él lo ocultó.

-¿Te acostaste conmigo sabiendo que esperabas un hijo?.-Le escupí las palabras con despresio.

-Amor, no es lo...-No dejé que terminara.

-No me llames amor, no te atrevas. ¿Porqué me mentiste? ¿Crees que eso no es importante para mí? No tengo mil años como para no darle importancia a esas cosas, Klaus. Soy un vampiro, pero de igual manera tengo moral, y no creo que haya estado bien que me ocultaras la verdad.

-Caroline, tienes qué escucharme. Por favor déja...-

-¡No me importan tus malditas excusas! No quiero volver a saber nada de tí, y prefiero dejar que Stefan muera antes de tener qué pasar otro segundo contigo.-Me fuí furiosa. Dejándolo ahí, parado con sus excusas y mentiras en la mano. Ya no me importaba nada, nisiquiera Stefan. Estaba tan furiosa que podría dejarlo morir. Si querían la maldita sangre de Klaus que vinieran ellos a conseguirla. Él tenía razón, sólo me utilizan cuando se trata de Klaus. Ahora estaba enojada con mis amigos, por culpa de él, me ponía mal, tenía un efecto en mí que no soportaba. OH DIOS. Enserio estaba furiosa. Iba caminando por la calle hecha un manojo de sentimientos. Necesitaba un maldito taxi, ahora. Por suerte, un hombre en un auto se detuvo frente a mí,.

-Hola, ¿necesitas ayuda?.-Parecía normal. Decidí hipnotizarlo.

-Llévame al hotel Crown Plaza.-Sus pupilas se dilataron.

Subí al auto. No dije nada en todo el camino, sólo quería llegar por mis cosas e irme de aquí lo más antes posible. El camino tardó un poco, pero al fin llegó. Bajé del auto. No me molesté siquiera en dar gracias, ni hacher olvidar al muchacho. Sólo quería subir y dormir un rato para volar de vuelta a Mystic Falls.

Cuando entré al cuarto de la habitación, nuevamente había una pequeña caja con una nota, como la anterior del vestido. Sabía que era de él, pero no me interesaba en lo más mínimo. La puse en el buró al lado de la cama, y entré al baño. Abrí la llave de la bañera agregando un poco de jabón líquido y sales de baño, y salí por una pijama. Cuando volví a entrar, la tina estaba llena, así que me desvestí, luego entré al agua. 
Quería relajarme. Olvidarme de Klaus por un rato. Quería librarme de todo el enojo que cargaba. Después comencé a pensar en la caja que no había abierto. Me dí cuenta que Klaus había estado allí, la idea me estremeció un poco, pero decidí olvidarlo. Entonces llegó la culpa. El enojo había pasado, y las ideas claras habían llegado. Me dí cuenta de que Stefan no podía morir, pero no quería ver a Klaus al menos en un siglo. Pero, ¿y si en verdad tuvo una razón? ¿un motivo?, ¿debí haberlo escuchado?. Las preguntas y dudas comenzaban a llegar a mi cabeza como rayos. Debía tomar una decisión. Pero no sabía cuál sería.

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Holaa! :) Nuevo cap :3 Espero les guste!!!!

Ayer no subí, perdón u.u' esque no tuve tiempo. Creo que no va a poder ser muy posible que suba los fines de semana, porque son días familiares (sabado y domingo) y casi siempre salgo. 

Otra cosa, primero había escrito a una Caroline riéndose por la noticia de Klaus cambiando pañales XD, pero esque no fue algo que haya escrito con inspiración, y decidí cambiarlo, so, salió esto :v espero les guste n.n

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Gracias por leer, xx