El Chico De Los Chocolates ©

Sexto Chocolate - Domingo 6

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Sexto Chocolate

Hoy mi mamá me puso a hacer todo el que hacer de la casa solo porque mi hermana se quebró la pierna ayer y no puede hacer el mínimo esfuerzo, ¿vas a creerlo? Me vine lo más pronto posible para no perderme la misa 'más bien perder de verte a ti mi niña', tanta fue mi prisa que olvide traer el snicker y tuve que pasar por la tienda que está cerca de la iglesia, hoy no habían de los grandes solo de los pequeños; espero el igual te guste mi niña.

Es primera vez que llego tarde, ya todo el mundo está sentado y no encuentro asiento, creo que me tocará quedarme parado y...

— Hola, puedes sentarte conmigo, si quieres — esa voz... sí, esa eres tú.

Volteo a ver a mi izquierda y tú estás sentada en la banca pegada a la pared que está a lado de la puerta principal, me sonríes como siempre lo haces con tus amigos... ¡espera! ¿Me estas sonriendo como lo haces con tus amigos? Eso es un avance ¿no?, ¡claro que es un gran avance!

— Hola — te contesto un tanto tímido, vaya, ¡Ian tímido! esto es de sorprenderse — Gracias — digo luego de unos segundos que me tome para sentarme, es raro... hay personas paradas pero tú tenías tu bolso en el espacio vacío, ¿será que lo apartaste para mí? O...

— Mi amigo Joshua no vino así que este lugar está libre — dices tranquilamente mientras pones tu bolso entre tú y yo 'genial para echar el snicker dentro'.

— Igual, gracias — te digo, aunque este asiento haya sido guardado principalmente para tu amigo no importa, porque quien está sentado a tu lado soy yo y no él *inserte voz macabra* Ian estas en una iglesia, relaja el cake.

No dudas nada más y pones toda tu atención en la misa que ya comenzó, también trato de poner la mayor atención a ella pero no puedo, mi mente me obliga a verte cada 5 segundos sutilmente por el rabillo de mi ojo izquierdo, es que ¿cómo decirte que tenerte tan cerca me pone muy nervioso?. Bueno, ahorita está hablando el padre de los matrimonios y no puedo evitar verme en un futuro contigo, casados y con 7 hijos 'ok eso es mucho, solo 3 entonces', no puedo evitar verme casado contigo en una casa no tan pequeña rodeados de nuestros pequeños niños, corriendo de aquí para allá mientras nos abrazamos sentados en una hamaca afuera en el jardín 'sigue soñando Ian, no matas a nadie con hacerlo'.

Extrañamente hace un buen rato siento una mirada fija en mí, busco con sutileza la dueña o dueño de esa incomodidad y me encuentro con una seria Katherine viéndome como queriendo matarme, ¿pero qué le pasa? Ella y yo terminamos hace ¿cuánto? Ya hasta perdí la cuenta. Tratare de ignorarla, ya que tu estas a mi lado y solo con eso me das una tranquilidad infinita, pero aish, en serio que molestia! Katherine deja de mirarme como si fuese tu novio y estuvieses... ¿celosa? Espera, espera, espera! ¿Esta celosa? ¡Sí! Esa es tu cara cuando estas celosa, pero... ¿de quién? Mmmm ni te creo, por casualidad ¿será de la diosa hermosa que tengo al lado mío? Que gracioso, la verdad no me interesa, tú nunca me gustaste, pero me siento importante al saber que mi toque aún no se ha ido, a pesar que llevo casi un mes sin novia.

El momento más importante 'para mí' ha llegado, 'darnos la paz'; me doy la vuelta hacia ti y tú mi niña linda con tu hermosa sonrisa me das la mano "la paz Ian" me dices y ensanchas más tu sonrisa esta vez dejando ver un poco tus hermosos dientes blancos, "la paz Barbara", bueno si me hablas por mi nombre ¿porque yo no?. Mientras das la vuelta para dar la paz a los que cuidan la entrada rápidamente meto el snicker dentro de tu bolso, oye mi niña, no andes dejando tu bolso abierto en otro tipo de lugares, no es correcto, bueno conmigo se vale ya que entonces no tendría otra forma de darte los Chocolates.

Hoy si te hablo porque te hablo, ya verás; la misa ha terminado y hoy no vino tu amigo Joshua así que no hay nadie que nos interrumpa, estoy a punto de decirte algo, mis dedos quedan a centímetros de tu hombro 'ya que estas de espalda a mi' cuando siento un jalón un tanto brusco en mi brazo obligándome a voltear a ver al causante de eso.

— Pero ¿qué? — logro decir para encontrarme con Katherine viéndome con una cara de pocos amigos. Se acerca a mi oído aun sosteniendo mi brazo.

— Ni creas que lo nuestro ha acabado, ya sé que eres el dueño de esos chocolates — y sin más se va de la iglesia dejándome perplejo, ¿cómo lo sabe? Jamás le conté mientras estuve con ella, y además ¿qué me quiso decir con que lo nuestro no ha acabado?

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¡Oh por dios! ¿Qué tramará Katherine? No se pierda el siguiente episodio de nuestra Mini historia mañana a la misma hora y por el mismo canal, xD jajaja ¡bueno ya! ¿Qué les pareció? ¿Esta buena? ¿Les gusta el camino que lleva esto? Si fue así no olviden dejarme sus comentarios, votos y sus sugerencias aquí  :-) ;)