Estoy escuchando mi voz mientras susurra los movimientos de mi mano.
Soy más feliz en mi pensamiento, amando lo que amo,
Sin buscar amor en esta tierra desierta.
Y es que tengo sed, pero no me dan de beber.
Tengo hambre, y nadie me da de comer.
Estoy solo y nadie me da la mano.
Los mejores cariños que recibo son de muertos y sus palabras.
Quiero ir a donde están ellos...
Nadie entiende el baile de mis manos, las huellas que dejan en papel.
Los que me aman sin conocerme están muertos.
Quiero escuchar sus palabras
Quiero ir a donde están ellos...
Y poder por fin concluir esta maldita carta.
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Navajas y otros poemas de un corazón afligido
Puisi¿Y si tu única salida es el dolor? ¿Qué pasaría si necesitaras tu dolor para vivir? ¿Que pasaría si tu dolor es lo que te define? ¿Y si dependes del filo de las navajas para existir?
