Cartas al desconocido.

Carta 51.

Querido Martin:

Tomándote como psicólogo, como mencioné en la última carta que te escribí, voy a contarte algunas cosas que hice todo este tiempo sin escribirte;

Me junté a tomar alcohol varias veces con mis amigas en secreto. Me siento un poco mal por eso pero me acuerdo de lo que produce en mi y me empiezo a sentir bien.

La chica que conocí bien el año pasado se drogó en el colegio con otros chicos y la descubrieron. Mi exnovio tenía plantas en la casa.
Mis padres ya no me dejan verla.

Me hice una página en internet donde subía fotos de cortadas mías y frases depresivas, como las tantas que hay. Mis padres la descubrieron y se pusieron muy mal, les dije que eran fotos viejas.
Algunas no lo eran.

Conocí a una chica por twitter con el mismo nivel de tristeza que yo o mayor aún. Les dije a mis padres que era amiga de otra amiga para que no hicieran escándalo y me junto muy seguido con ella.

El día que se cumplía un año exacto de que me dejo mi ex novio me junté con una amiga que le paso algo malo el mismo día y borramos el recuerdo de nuestra mente con unas copas de alcohol escondidas.
Me hizo bien creo que si no lo hacía me habría cortado mucho aunque el chico ya no me interese.

Me escapé de una fiesta de 15 que me habían invitado y me fui con amigas a la fiesta de un desconocido, después nos subimos a los autos de unos chicos que yo no conocía y nos llevaron bien lejos a tomar y escuchar música. Podría habernos pasado cualquier cosa, no había casas ni alumbrado público.
Volvimos 2 horas más tarde al 15, nos vieron los padres de la cumpleañera.
Tengo que confesar que me asusté mucho y no podía creer lo que había echo.

En todo este tiempo no bese a nadie, soy un fracaso.

En el cumpleaños de otra chica robamos el alcohol de los adultos y nos lo tomamos a escondidas.

Y hoy es hoy, dos días después de lo último que te acabo de contar.

Me hace bien contarte estas cosas aunque no las leas.

Es casi como si tuviera un amigo.