Era viernes, y mi mejor amigo Calum me había invitado a su casa para jugar algunos video juegos, eran al rededor de las 8 y Cal había pedido una pizza, mientras llegaba decidí jugar un poco, escuché como el celular de Calum sonó y vi como se levantó para ir y contestarlo con mayor privacidad, debe ser su novia, pensé.
Llevábamos siendo amigos desde hace unos 5 años, pero últimamente nos habíamos separado y las cosas se habían tornado un poco raras, el tenía nuevos amigos y podríamos decir que no me llevaba muy bien con ellos por lo que siempre era yo el que quedaba sólo mientras Calum se divertía con ellos, cosa que realmente me molestaba, me sentía reemplazado. Después de tener una charla bastante cursi de cómo me sentía al respecto, Calum me pidió disculpas y dijo que nunca cambiaría un mejor amigo como yo y le creí, así que aquí me encontraba hoy, para pasar un rato junto a él mientras jugábamos vídeo juegos y tomábamos algunas cerveza, comíamos pizza y hablábamos de cosas sin sentido, como en los viejos tiempos.
-Luke viene en un momento. - Dijo como si nada.
-¿Luke? ¿De todos los idiotas de tus amigos viene él? Además se supone que no vendría nadie.-Dije más que molesto.
Luke Hemmings, el chico de ojos azules y pelo rubio que hacía mi vida imposible, el maldito estereotipo que todas las chicas tenían de "chico guapo" un jodido egocéntrico que creía que todo el mundo giraba a su alrededor, y podía ir por ahí haciendo sentir mal a todo el mundo, como era mi caso, el hijo de puta se había encargado de hacer mi vida imposible ¿Por qué? No lo sé, eso mismo me pregunto yo.
-Se quedó por fuera de casa porque perdió sus llaves, no lo iba a dejar en la calle.
-Bien, entonces me iré. -Dije, bastante decidido a irme de allí.
-Michael. Deja de comportarte como un crío.
-Me comportaré como se me de la gana. -Dije alzando mi bolso.
-Basta. -Dijo tomándome del brazo. -Te quedarás acá y le diré a Luke que no se comporte como un idiota y ya está ¿De acuerdo?
Me resigne y volví a hacer mi camino hacia el sofá, no podría ser tan malo.
La puerta se abrió y no podría ser nadie más que el mismo Hemmings en persona.
-Hey Cal. -Dijo chocando puños con este.
Se sentó al otro lado del sofa ignorando por completo mi existencia, cogió uno de los controles y quito todo lo que yo había hecho, idiota, imbécil, hijo de puta.
-Aquí está la pizza.-Dijo Cal dejando la caja sobre una pequeña mesa en frente de nosotros.
La abrí y me dispuse a coger un pedazo de esta pero Luke me la quitó.
-Si comes te engordaras más de lo que ya estás ¿No crees? -Dijo con una sonrisa burlona.Mis ojos picaron y un nudo se formó en mi garganta. Calum llegó y se sentó entre Luke y yo tomando un pedazo de pizza.
-¿No vas a comer? -Me preguntó.
Negué, porque sabía que si hablaba mi voz se quebraria.
Me quería ir de allí, lo más lejos posible y saber que no tendría que ver a Luke por el resto de mi vida, jugamos un poco, pero mis ánimos ya estaban por el subsuelo. Y a mi mejor amigo parecía no importarle.
-Hey Michael, ¿Quieres algo de helado? -Me preguntó Calum.
-¡Calum! ¿Qué clase de amigo eres? No ves que sólo vas a empeorar el cuerpo de Michael. -Dijo Luke.
-Luke. -Dijo Calum en un tono serio, como si lo estuviese regañando.
Esas malditas palabras me dolían más de lo que se podrían llegar a imaginar, y sentía que si seguía un sólo segundo más allí rompería en lágrimas.