Me encontraba metiendo todas las bolsas con comida que había comprado en el supermercado, la mayoría de comida era la favorita de Luke, galletas, papas, helado. Luke me había dicho que saldría con una prima a visitar a una tía que estaba por la ciudad, lo cual fue un cuento muy reforzado y no le creí, pero aun así lo deje tener el día libre. Decidí salir a hacer las compras y no podía faltar todo lo que Luke quería.
Conduje hasta que llegue a nuestro apartamento, habíamos comprado uno hace unos meses, llevábamos 3 años de relación y todo salía más que perfecto. Estacione el auto y entre al elevador con todas las bolsas en mis manos. Una vez llegue coloqué todas las bolsas en la cocina.
—¿Luke? —Llamé.
No recibí respuesta, por lo que supuse aún seguía afuera. Camine hacia la habitación para ver televisión, sacaría las compras y las pondría en la alacena después. Cuando llegué a la habitación me encontré con Luke arropado en la cama. Salte sobre el y empecé a besar su cara, pero me separe al sentir mis labios mojados, estaba llorando.
—Bebé. —Dije preocupado. —¿Qué pasa?
Luke no respondió, tenia sus ojos cerrados mientras las lágrimas bajaban por sus rosadas y hermosas mejillas.
—Lo siento. —Sollozo. —Lo...lo siento Mike.
—¿Por qué lo sientes bebé? ¿Que pasa? —Pregunté mientras acariciaba su cabello.
—Mentí sobre visitar a mi tía. —Dijo y apenas podía entender lo que decía entre lágrimas.
—Está bien Luke, no llores por eso, esta bien. —lo bese.
No entendía porque estaba llorando por esto, debería estar enojado con el por no ser sincero conmigo, pero no era para tanto, me dolía verlo así. Luke seguía llorando y no entendía por que, le había dicho que todo estaba bien, que no llorara más, pero el seguía llorando y empecé a temer que tuviera algo más que decirme. Los minutos se hacían eternos, mientras abrazaba y acariciaba a Luke esperando a que dijera algo más, hasta que por fin habló, y cuando lo hizo fueron las peores palabras que pude haber escuchado.
—Tengo cáncer. —Dijo apenas audible.
—¿Qué? —Fue lo primero que salio de mi boca, no lo pude siquiera procesar.
—Fui al médico, no quería decirte nada, no quería preocuparte, por eso te mentí diciendo que visitaría a mi tía. —lloro. —Lo siento Michael lo siento.
—No...no tienes por qué sentirlo Luke, no es tu culpa.
—Te he hecho desperdiciar 3 años de tu vida Michael ¿Sabes porque? Por que moriré.
—No digas eso Luke yo...
—¡Es lo que pasará! ¡Tienes que aceptarlo! ¡Moriré!
El sentimiento que sentía en mi sólo se describiría en un nudo en mi garganta y un nudo en mi estomago, y pensé en lo mucho que odiaba vivir.
Cuando alguna persona muere, recibes la noticia y el dolor viene consigo, pero este sentimiento era mil veces peor, porque estas con esa persona que amas y sabes que en un momento se irá. Esto es...inexplicable.
—Yo también moriré.
—Sabes que no me refiero a eso.
Suspiré.
—No me has hecho desperdiciar tiempo Luke, estos han sido los mejores años de toda mi vida. —Dije y le di un corto beso.
—Tengo 1 mes. —Susurró.
—¿Por qué no lo vimos antes? ¿A tiempo?
—Es mejor que lo hayamos descubierto ahora ¿no crees? De lo contrario pasaría todos los días despertando y diciendo "oh, no he muerto aun"