Capítulo 17...

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- ¿Qué estas estudiando?-. Pregunto Álvaro en uno de los giros.

- Química-. Sonrió Leonie.- Supongo que tú trabajas con tu padre.

- Supones bien, como siempre-. Rió Álvaro.- Así que Química, pensé que ibas a optar por Historia o Biología, cuando te hablaba de mis asignaturas esas eran tú favoritas.

- Cierto, me sigue gustando ambas. Pero las dos las entendía mejor contigo, que con los profesores-. Leonie rió a carcajadas.- Podías haber estudiado Magisterio, total la Ally McBeal de la familia es tu hermana.

- Cierto-. Álvaro la acompañó en su risa.


Después de bailar con Álvaro volvió con sus amigos, pero ya Raúl se había ido. Estuvieron hablando un rato más hasta que Leonie y su familia se marcharan. Una vez en casa y soltando el bolso dorado que había llevado como único complemento, Leonie se sentó en su cama y se quito los zapatos mientras Matt sentado en una silla cercana le hablaba.

- Es mi deber decirte que Raúl se fue en el momento que Álvaro te saco a bailar-. Comento Matt.

- Bueno-. Se encogió de hombros.- Tampoco iba a decirle que no, hacía mucho que no nos veíamos. Simplemente me apeteció bailar con Álvaro, como lo hice contigo o con él. Ayúdame-. Se giro para que le bajara la cremallera.

- ¿Has hablado ya con Raúl de las condiciones?-. Matt la ayudó y le acaricio la línea de la columna. Deposito un beso en su nuca.- Contéstame Leonie-. La giro para mirarla a los ojos.

- No, aún no le he dicho nada-. Leonie evito la mirada de Matt.

- Sientes algo por él ¿verdad?-. Le levanto la barbilla.

- No lo sé, pensaba que no iba a sentir nada por Raúl después de lo que me hizo-. Se encogió de hombros.- Quería que se volviera loco conmigo, para luego pasar de él.

- ¿Y?-. Matt la azuzó.

- Creo que la que se está volviendo loca soy yo-. Una lágrima asomo en sus ojos.

En ese momento Matt la abrazo y la consoló como buenamente pudo, le termino de quitar el vestido y le puso el pijama. Fue al baño y cogió las cosas para desmaquillarla, una vez terminó sonrió y le dio un beso en la frente.

- Descansa princesa-. Dijo Matt para, segundos después salir de la habitación de Leonie.


A la mañana siguiente Leonie estaba más animada, desayuno con Matt y su familia, limpio y ordeno su habitación y ayudó a Matt con la suya, preparo la ropa que se pondría para pasar el día con David y le mando un mensaje a Raúl.

<< Hola, ayer te fuiste y no pudimos despedirnos. Esta noche estoy en el bar, pásate si quieres. Un beso.

>> Intentare pasarme.

Raúl casi tiró el móvil por la ventana en el momento en que leyó el mensaje de Leonie. La noche anterior había sido perfecta en muchos sentidos, Raúl veía que entre Leonie y él había un acercamiento, habían hecho el amor en los jardines de Claudia, habían bailado y hablado como personas civilizadas, pero después apareció Álvaro. En ese momento acabo su alegría, y es que no pudo soportar ver como Álvaro le dedicaba tanta atención a Leonie. Un momento, ¿estaba celoso? ¿Celoso porque otro hombre centraba su atención en Leonie? Es cierto que le gustaba físicamente, que era atractiva y muy fogosa, y también que no quería estar peleando constantemente con ella pero ¿verdaderamente sentía algo por ella? Algo más allá del físico y el sexo.


- Hola preciosa.- David la saludo al entrar en el coche.- Tan guapa como siempre-. Miro el conjunto que estaba compuesto por unos leggins de cuero, unas botas y una chaqueta de color negro, la nota de color la daba el bolso y la camiseta larga color coral.

- Adulador-. Leonie sonrió y le dio dos besos.- Espero que me sorprendas en todo.

- Seguro que sí-. Dijo David mientras arrancaba el coche y se dirigía a su casa.


David tenía razón, la había sorprendido en todo. Su relación había cambiado mucho en las últimas semanas, ya no solo quedaban para tener sexo. David había sabido acercarse al corazón de Leonie con veladas tan encantadoras como la de ese día. Una vez llegaron a casa de él, se habían puesto a preparar la comida y Leonie se sorprendió gratamente al ver que se desenvolvía bien en la cocina y que no iba a preparar los típicos platos de pasta. Comieron ensalada de primero y salmón de segundo, el postre como no, helado. Después se sentaron en el sofá y comenzaron a hablar de diversos temas, para a continuación ver una película.

- David, no me puedo quedar para cenar-. Comento Leonie mientras tomaba un café.

- Trabajas esta noche ¿no?-. Leonie asintió.- Podemos cenar algo fuera y luego me invitas a una copa.

- Eso está hecho-. Sonrieron.

Después de la cena David acompaño a Leonie a abrir el bar, a los poco minutos vio sorprendido como el bar se llenaba de gente. Leonie lo dejo con un vaso de Martini y se fue a servir mesas, cuando la cosa se relaja conversaban un poco, hasta que Leonie se volvía a ir.


- Buenas noches Leonie-. Raúl la miro con una sonrisa.

- Raúl-. Leonie le sonrió desde detrás de la barra y salió a darle dos besos.- Pensaba que no ibas a venir.

- Pues aquí estoy-. Extendió los brazos y miro atrás.- Raquel, ven-. Una chica rubia se acerco.- Leonie, te presento a Raquel, mi novia.

- Encantada-. Dijo la rubia mientras se acercaba a dar dos besos a una sorprendida Leonie.

- ¿Nos pones dos mojitos?-. Ordeno Raúl.

Que estúpida había sido, Raúl siempre le iba a tomar el pelo. Había llegado a pensar que él podía cambiar, que podían intentar algo en serio, pero ahí estaba otra vez con una rubia que restregarle por la cara. La diferencia es que hace cinco años huyo a Londres, esta vez cogería al toro por los cuernos.

- Dos mojitos, marchando-. Leonie se volvió a meter en la barra y preparo las bebidas, las llevo a la mesa.- Espero que os guste-. Sonrió con dulzura.

- ¿Leonie estas bien?-. David la miro.

- Perfectamente, me voy a bailar un rato-. Se fue con un grupo de chicos.


Hasta que me conocisteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora