Capitulo 3

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Multimedia: Allison y Holland

- 1 y 2 y 3 y 4- Holland, la capitana de las animadoras, ya había comenzado a hacer los calentamientos, y yo como siempre llegaba tarde.

Solté la mochila en la que iba mi ropa, para después integrarme en el grupo, junto a Carolina.

-Llegas tarde- me susurró mi mejor amiga, para imitar a nuestra capitana.

-Te recuerdo que mi castigo aún permanece- le respondí haciendo lo mismo que la capitana, mientras bufaba sonoramente.

Y era cierto, mi castigo llevaba ya dos malditas semanas. Al parecer para mi padre el simple hecho de no dejarme salir no era suficiente, y por eso llevo dos semanas así, sin móvil, sin ordenador, ¡sin vida social! O sea...soy una de las chicas más populares del instituto, no me pueden restringir mi vida pública, soy el punto de mira de todo el mundo, y ahora no soy más que la niñita de papá, castigada toda la vida.

-Y tú decías de mis padres...- la burlona voz de mi castaña amiga me molestó bastante.

-Que tus padres se traguen todas tus mentiras no significa nada, yo no tengo un hermano que me cubra las mentiras- masculle en un tono algo elevado.

-Chicas-Holland paró el entreno, mirándonos- Por favor, me encantaría saber que es eso tan importante- pidió dejando caer los pompones a sus costados, cruzandose de brazos.

Ambas nos miramos en silencio, mientras que el resto de las chicas nos observaban con atención.

-Enserio, si alguna de vosotras ha echado el mejor polvo de su vida me gustaría saberlo, una risa de vez en cuando no viene mal- su algo chillona voz hizo que me dieran ganas de lanzarle los barrotes de Arianna a la cabeza, pero me contuve.

-No es nada-Carolina nego con la cabeza y nuestra capitana accedió, volviendo con la práctica.

Holland no era la típica capitana hueca que se cree la reina del instituto, por que básicamente, una de ellas era yo. Es agradable, siempre y cuando le sigas el juego, se podría decir que incluso somos amigas...

Cuando la práctica acabó, los chicos del equipo de fútbol aparecieron, y con ellos los nuevos integrantes.

-¿Nos quedamos y vemos el espectáculo de los nuevos?- Allison puso sus brazos en jarra, mientras todas nos posicionabamos en el césped, frente a las gradas.

-¿Quienes son los nuevos?-

-Según Dylan, son como unos 45 chicos para la prueba de Lacrosse, y unos 75 para la de fútbol americano- Holland nos mantenía siempre informadas de todo, y eso era algo que agradecía.

A mi no me importaba la vida de nadie, ni lo que ocurría cada día a cada hora en el instituto, yo con lo mío ya tenía bastante.

-¿Dylan hará las pruebas de lacrosse y Scott las de fútbol, no?- Allison se giró para mirar a nuestra capitana, la cual asintió.

Ellas eran como hermanas, se conocían desde siempre, incluso sus novios eran mejores amigos. Dylan y Scott.

Negué con la cabeza y fijé mi vista en el campo. Éste estaba dividido en dos, una parte sería las pruebas para lacrosse, mientras que el otro sería de fútbol. Recorrí la masa verde lentamente, fijándome en un rostro demasiado familiar.

Sonreí ampliamente, mordiéndome el labio inferior. Era el chico de la fiesta.

-¿Qué pasa?-la divertida voz de mi mejor amiga hizo que sonriera aún más.

-Aquel chico, el castaño alto- le señalé con el dedo, fijándome en que mi amiga asentia- Ese es el chico de la fiesta- le informé, mientras ella me miraba estupefacta.

La vida de CarlyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora