La vida de Carly

Capítulo 5

-Sh- coloqué mi dedo índice sobre mis labios y miré a Mike con ojos suplicantes-Por favor callate- pedí y él me miró como si le acabase de pedir que detonara una bomba.

-¿Pero tú te has visto? Parece que han puesto una jodida aspiradora por todo tu cuello- gruño y me miró mejor-Y tus pechos, pero me siento incómodo hablando de eso- dijo apartando la mirada.

-No se lo digas a mi padre- suplique cogiéndole de la camiseta.

-Luke es el menor de tus problemas ahora-

-Créeme que no, por favor...tito Mike- hice carita de angelito.

-¿Quién fue?¿Es tú novio o algo?-

-No es mi novio, estamos en el proceso- mentí, no tenía pensado salir con él, pero si le decía eso empeoraria las cosas.

Y me tacharia de puta, cosa que no quiero.

-Eso no es...-

-Estoy enamorada de él -dije de repente, haciéndole abrir los ojos,  hasta tal punto que él piercing de su ceja casi toca su cabello.-Si, así es- respiré profundamente al saber que lo había engatusado.

-Eres muy joven- dijo después de un momento de meditación -Tienes que presentarmelo, lo sabes, ¿no?- alzó una ceja y yo sonrei nerviosa.

-Lo llevaré a casa por navidad-

Él paso una mano por mi espalda, haciendo ademán para ir con los demás.

Me coloque mejor la camiseta, pero seguían viéndose las marcas, por lo que la subí hasta el cuello, dejando mi abdomen un poco a la vista.

-Carly, ven un segundo- escuché la llamada de mi madre, y yo me mordi el labio inferior.

-Voy a arreglarme-dije sin girarme.

-¿Por qué llevas la blusa así?- preguntó mi padre, y yo quería golpearme la cabeza contra la pared.

-Tengo frio- dije y seguí andando, pero escuche pasos que me seguían.

-Tío déjala-la voz de Mike resonó en la habitación, y supe que era papá quien me seguía.

Corrí hasta la habitación de Carolina, cerrando la puerta después.

-Carlota abre la puerta- exigió a través de la madera.

-Joder papá, dejame tranquila, tengo frío -masculle y mi amiga abrió los ojos al momento.

-¿Qué has dicho?- preguntó asombrado de mi vocabulario.

Dios mio, se piensan que tengo 2 años o que mierda.

-Déjame, en seguida salgo-

Se oyeron los pasos alejarse, por ello respiré tranquila.

-¿Qué ha pasado?- preguntó Carolina, tallandose los ojos.

Yo camine hacia ella lentamente,para después coger una almohada y golpearla con ella.

-¡Eh, para!-gritó.

-¡Me has dejado sola ahí fuera, pedazo de guarra!-

-¡Estaba durmiendo!¿Qué pretendias,qué me despertase? -preguntó con un toque de gracia,y yo me lancé sobre ella.

Empezamos una especie de "guerra" que no llevo a ninguna parte, sólo consiguió que nos cayesemos de la cama.

-Necesito un pañuelo, y bien grande- dije poniendo una mano en mi pecho y cuello.

-Ya ves tía, esta super mal- dijo ésta mirándome y levantándose.

-Muy bien, veo que tú también te has dado cuenta, bravo- dije con sarcasmo, haciendo que ella gruñiese.