Hace tiempo me preguntaba cómo era posible amar a una persona por encima de todo... Me lo pregunté muchas veces pues me intriga mí gran obsesión por ti. Hoy puedo decir que ya lo comprendí... Y lo describo así: Mi amor hacia ti es tan grande que desde el primer instante en que entraste a mí vida impregnaste mi ser de tu esencia... Fue una fusión entre tú y yo la cosa más hermosa que me pudo pasar... Amarte es amar a través del tiempo, sin horas ni fechas...
Es amarte a distancia, no importa si esa distancia es eterna o si no estás conmigo. Sigues siendo mío por qué eres parte de mi piel de mí ser de mi vida misma... Me conformo con tenerte sólo en sueños, sólo en ráfagas de pensamientos que se apoderan de mí en mi nostalgia, en mis alegrías, en penas. Amarte es amar lo que tus amas por encima de mi voluntad... Es ahogar un te amo por no hacerte daño... Es esperar lo que no llegara jamás...
Es tener la voluntad de buscarte entre la multitud aún sabiendo que no estarás ahí. Amarte es alejarme de mi realidad para adentrarme en una fantasía, es adentrarme en un mundo donde jamás te fuiste... Donde sólo existimos tú y yo. Amarte es sentirte sin tocarte, es sentir tu aliento, tu olor, es dormir con la completa sensación de que estas a mi lado... Despertar y ver que no estás junto a mi pero con la esperanza que te veré en sueños.
Amarte es pedirle a Dios que hagas lo hagas jamás sientas esta angustia que siento yo por no tenerte... Amarte como yo lo hago es mandarle a Dios este pensamiento para que te lo haga llegar y comprendas que como yo nadie te amara jamás...
