Everything Has Changed (James Y Tu )

·Capitulo 01·

  -Adiós papá, adiós mamá – dijo mientras abrazaba a sus padres.
-¡Adiós enana!
-¡Hey! – dijo enfadada su hermana menor.

Ella solo sonrió.
Se despidió de su familia una vez más, para después subirse al auto de su novio y comenzar a desaparecer por el camino.
-¿Estas ansiosa por conocer tu nuevo hogar?
-algo...- sonrió – me irás a visitar seguido ¿verdad?
-claro que si
Le sonrió y se inclino un poco a un lado para besar los labios de su novia.
Después de haber pasado unos minutos de viaje. Llegaron al lugar donde ________ viviría.
Bajaron las cosas del auto llevándolas al departamento.
Comenzó a vibrar el celular de Logan.

¿Hola? – Contesto, dejando las cajas que traía en las manos, en el suelo – si, si claro... voy de inmediato. Ok, ¡te veo allá! – termino la llamada.
-¿Qué ocurre?
-Me tengo que ir... amor lo siento, pero me llamaron del trabajo.
-Pero...
-Te vengo a ver más tarde, ¿bien?
-Bien.

Se besaron tiernamente. Cuando terminaron con el beso, Logan se fue rápidamente a su auto.
________ traía algunas cajas en sus manos. Una sobre la otra.
Saco cuidadosa las llaves de su bolsillo.
Buscó la llave correcta para insertarla en la cerradura.
En una acción descuidada las dejo caer al suelo.
-¡Pero qué tonta! – se dijo.
Trato de agacharse para tomarlas pero le fue imposible con todas las cajas que traía en las manos.
De reojo vio que alguien se venía acercando. No dudo en pedirle que la ayudara.
-Disculpa... - dijo - ¿me podrías hacer un favor?
El chico que paso por su lado no le tomó mucha importancia a lo que ________ le había dicho.
-¡Hey! – Volvió a decir la chica llamando la atención del extraño que al parecer ahora sería su vecino – ¿Podrías ayudarme? Por favor...
-¿Con qué? – dijo sin mucho ánimo.
-Es que – explico – me estoy recién mudando aquí, y estaba por abrir la puerta cuando se me cayeron las llaves... ¿Podrías levantarlas por mí?
-¿Por qué no las levantas tú?
-No sé si lo notaste pero – rió – tengo unas cajas en mis manos. Y no las puedo levantar...
-Si lo note... pero estoy un poco apurado y no podré...
-Por favor – interrumpió – ¡no te tardaras nada!
El chico miro su alrededor para ver si es que no venía nadie más que la pudiera ayudar.
-Bien.
Se dispuso a ayudarla.
Inclino su cuerpo al suelo para alcanzar las llaves.
Las tomo en sus manos y se las entrego a ________ al mismo tiempo que la miraba a los ojos.
Luego de esa acción. El chico castaño de ojos color miel volteo para seguir con lo suyo, mientras ________ intentaba abrir la puerta.
La quedo observando cómo trataba de abrir.
Sin darse cuenta, a la chica nuevamente se le cayeron las llaves de las manos.
-¡Mierda!... – susurro bajo.
El chico intento abrir rápidamente la puerta de su departamento antes de que _________ le pidiera ayuda otra vez.
Pero... el sonido de la perilla de la puerta lo delato.
________ volteo hacia él y le sonrió.
-Sera la última vez... lo prometo.
-Mira, de verdad ahora no puedo... en dos minutos comienza un partido de fútbol y necesito ir...
-Por favor – interrumpió – es solo recogerlas.
-bien – las recogió
La chica estiro la mano para recibirlas pero James no se las entrego.
-Prefiero abrir la puerta yo... antes que se te vuelvan a caer. ¿Ok? – dijo en un tono molesto
________ se sintió algo ofendida. Ya que el chico le quiso tratar de decir que era torpe.
Arqueo una de sus delgadas cejas.
Una vez que abrió la puerta le entrego las llaves en la mano.
-De nada. – dijo aquel chico y guiño su ojo.
La chica seguía con la ceja arqueada.
James se encamino hasta la puerta de su departamento y entro. Cerrando de un golpe la puerta.
-Además es mi vecino... engreído – susurro despacio.
Se aproximo a entrar todas sus cosas.
Cuando ya había entrado todo. Suspiro de cansancio y se sentó en el suelo para descansar.
-Bien... ¡a ordenar!
Se levanto y comenzó a ordenar lo que ahora sería su nuevo hogar.
Después de unos diez minutos de haber estado ordenando, golpearon la puerta.
Se acerco a abrirla.
-¡Hola, Hola! – dijo emocionada Ammy.
-¡Vinieron!
-Nos costó un poco encontrar tu departamento – agrego Victoria.
-Pero si les di bien la dirección
-Sí, pero a Victoria se le perdió el papel donde había anotado el número del departamento – sonrió – solo se acordaba que era doscientos...Y algo...
-Doscientos quince – rió
-Pero de todos modos llegamos.
Entraron al departamento mirando todo a su alrededor.
-No es tan pequeño como creí – rió Victoria.
-No es para nada pequeño – dijo Ammy asombrada – ¡podríamos hacer una fiesta en este lugar! Invitar a muchas personas – sonrió.
Rieron todas juntas.
-Ahora no. Más adelante probablemente – sonrió ________.
-Bueno – dijo Ammy – ¡celebremos de todos modos!
Levanto una botella de champagne que traía en la mano.
-¡Por el apartamento nuevo!
-Podremos celebrar todo lo que queras, pero...
-Pero... - Repitió la chica.
-Ordenemos primero.
-¿Qué? ¡No! Nosotras vinimos a celebrar, no a ordenar.
-Por favor... ayúdenme. Luego celebramos todo lo que quieras.
Miro a sus dos amigas con cara de cachorrito tratando de convencerlas.
Sabía que haciendo eso lograría que la ayudaran a ordenar.
-¿Si? ¿Me ayudaran?
-Ok – dijo Victoria
-¡Pero Victoria! – Exclamo Ammy
-¿Qué? ¿Acaso no viste su carita?
________ sonrió victoriosa.
Comenzaron a ordenar el living, luego la cocina, la habitación de ________ y por último el baño.
Una vez que terminaron todo. Se sentaron en el sofá cansadas.
-Ven – suspiro cansada – no nos demoramos nada.
-Bien, ahora ¡a celebrar!
Ammy tomo el champagne y la abrió provocando un leve sonido, y la tapa salió volando.
________ llevo tres copas dándole una a cada una.
-¡Por el departamento nuevo!
-¡Por el departamento nuevo! – repitieron ________ y Victoria.
Alzaron las copas al aire.
Rieron y bebieron casi toda la tarde.
La hora avanzaban. Eran casi las once de la noche y ________ al otro día debía levantarse temprano para ir a la práctica de enfermera.
Ammy y Victoria se fueron, dejándola sola en su nuevo hogar.
Apago las luces y cerro bien las puertas para luego encaminarse a su habitación.
Se coloco el pijama y se recostó en su cama.
Despertó al otro día por los insistentes sonidos de su despertador.
Como pudo, saco su mano derecha de entre las sabanas para apagarlo.
Tiro aquellas sabanas lejos y se levanto.
Entro al baño, se dio una ducha rápida y salió.
Una vez en su habitación se vistió lo más rápido que pudo.
Un poco de maquillaje no muy cargado y ya estaba lista.

Tomo el delantal de enfermera que estaba en una silla de la habitación.
Camino hasta la cocina. Se sirvió un poco de café. Le dio un par de sorbos largos terminando todo lo que estaba en su tasa.
Camino al baño donde lavo sus dientes.
Miro el reloj de su muñeca – un lindo obsequio de su novio por cierto – tenia veinte minutos para llegar. Por suerte el hospital no le quedaba tan lejos.
Tomo el delantal, las llaves del apartamento y salió.
Llego rápidamente al hospital donde ya se encontraba Victoria.
-Hola.
-Que tal...
-¿Llegue tarde? – pregunto preocupada.
-No, aún no ha llegado el señor Carlos. Así que está todo bien – sonrió.
-Genial – sonrió mientras se colocaba su delantal de un color verde claro.
Entraron juntas a aquella sala donde el señor Carlos; que era el supervisor y doctor de ahí, les explicaría que debían hacer.
Entraron. En el lugar se encontraban dos chicas más.
De pronto por la puerta entro un señor de aproximadamente cuarenta y cinco años de edad, con una tabla con hojas en la mano.
-Buenos días – saludo a las cuatro chicas que se encontraban ahí.
-Buenos días – respondieron todas.
-Espero que ya hayan llegado todas, ¿no?
Nadie respondió, solo miraron todas a su alrededor a ver si faltaba alguien.
-Hay cuatro... - susurro Victoria a ________ - pero somos cinco ¿verdad?
La chica pensó por un instante.
-Sí, somos cinco.
-Entonces falta...
Antes de que Victoria dijera quien faltaba, se abrió de golpe la puerta. Una chica entro poniéndose el delantal rápidamente y agitada.
Llevaba la vista en el suelo, pero al entrar la levanto mirando al señor Carlos.
-Llegas tarde Lucy – anoto en una de las hojas que traía en la tabla – otra vez.
-Lo siento de verdad – explico – había mucho tráfico.
-Bien – suspiro – entra y ponte por ahí.
La chica obedeció.
Formaron un semicírculo. El señor comenzó a hablar y dar las órdenes del día.
Mientras ________ estaba en aquel hospital haciendo la práctica. 

James se encontraba durmiendo plácidamente sin que nada ni nadie lo molestara.

Despertó por los cálidos rayos de sol que entraban entre las cortinas de su habitación.
Destello sus ojos con las manos y apenas abriéndolos.
Se estiro en la cama para luego levantarse y en bóxer caminar hasta la cocina.
Puso la máquina para preparar café.
Luego se dirigió al baño, donde lavo sus manos y rostro para despertar mejor.
Tocaron la puerta de su departamento.
-¿Quién será a esta hora, tan temprano? – se dijo.
Saco unos short y rápidamente se los puso.
Seguían golpeando la puerta.
-¡Ya voy! – grito.
Camino hasta la puerta y la abrió.
-¿Qué haces aquí tan temprano