Everything Has Changed (James Y Tu )

ºcapitulo 03º

  Eran las ocho treinta y seis y ya habían comenzado a beber.

-Hey – dijo Carlos llamando la atención de James y Kendall – miren allá.

Los chicos voltearon cuidadosos para poder mirar a las dos morenas y una rubia que estaban a un par de puestos de ellos.

-Pero que mujeres – Dijo Kendall.

James solo rió.

-Comenzamos bien la noche – añadió este.

Los chicos sonrieron.

-Y bien, ¿Qué haremos?
-¿Con qué?

Carlos hizo una seña con la cabeza indicando a las chicas que estaban cerca.

-Dejemos que el conquistador profesional lo haga – Comento Kendall.

James sonrió al notar que se referían a él.

-Bien, bien... si ustedes lo piden – rió.
-Espero que lo logres.
-Claro que lo lograre... ¿Cuándo he fallado?

Sonrieron todos juntos.
James se levanto de la mesa.

-¡Karen! – Dijo llamando la atención de la mesera, que por cierto, era amiga de los chicos – Necesito que me des una libreta para hacer los pedidos a las mesas.
-¿Para qué?
-Por favor es para algo importante – le indico disimuladamente a las chicas – Te la devolveré.
-James – alargo - ¿Cuándo dejaras de coquetear a todas las chicas que veas?
-Vamos... no me tardare más de cinco minutos.
-Está bien.

Le entrego una libreta junto con un lápiz.

-Gracias eres la mejor – sonrió.

Tomo todo en sus manos. Paso cerca de la mesa donde estaban los chicos.

-Observen y aprendan – dijo.

Camino hasta la mesa de las chicas.

-Buenas noches hermosas damas... ¿Qué van a querer? – Sonrió coqueto.

Esa era uno de sus fuertes, su sonrisa... su gran y reluciente sonrisa.
Luego venia su mirada, una mirada que lograba derretir a cualquier mujer que lo observara directo a esos ojos color miel.
Además de que es bastante guapo.

-Somos nuevas aquí – sonrió la rubia – es la primera vez que venimos a este pub, y no sabemos qué clase de tragos dan en este lugar – volvió a sonreír, pero esta vez coqueta.
-Son unos tragos excelentes – sonrió – como ustedes – guiño el ojo.

Las chicas rieron nerviosas por las palabras dichas.
Las estaba coqueteando y ellas estaban cayendo en el juego.

-Te creo – comento una de las morenas – basta con mirarte para saber que son excelentes los de aquí – sonrió.

James rió nervioso. Las chicas ya habían caído en el juego.

-Y bien... ¿Qué les traigo?
-Tráenos tres de los mejor que tengas.
-Bien, tres de los mejores – sonrió – ya los traigo – guiño el ojo.

James se devolvió donde Karen.
Le entrego la libreta con el lápiz y luego se acerco a la mesa de los chicos.

-¿Lo lograste?
-¿Cuándo les he fallado? – sonrió victorioso.

Los chicos se levantaron de la mesa y caminaron junto a James donde las chicas.
Al llegar ahí, ellas lo miraron extrañadas.

-Pidieron tres de los mejor que teníamos ¿O no? – Sonrió – aquí estamos.

Las chicas rieron tímida, pero le siguieron la idea.
Los chicos se sentaron junto a sus nuevas conquistas, aunque para James, eran solo una más de la noche.

Mientras ellos se divertían, ________ junto a Victoria se afligían por no saber que ropa ponerse.
Tenía ya toda la ropa derramada en la habitación de ________.

-¡Esto!
-No, no me gusta como para ir a la disco.
-Pero, ¿Para mí? – Pregunto Victoria.

Su amiga la miro, y negó con la cabeza.

-¡Ya se!

________ camino hasta un cajón de su closet que no había abierto.
Saco un vestido y se lo entrego a Victoria.

-Este es para ti.

Victoria abrió los ojos sorprendida.

-Qué lindo... - comento.
-Póntelo tú
-Claro, pero ¿Tu que usaras?

Siguió buscando y saco otro vestido.

-¿Este? ¿Qué te parece?
-Está hermoso... ¡úsalo!

Rápidamente se cambiaron de ropa. Ya eran las nueve treinta y cinco, tenían un par de minutos para terminar de alistarse.

Se pusieron unos zapatos que combinaran.
Se maquillaron y arreglaron su cabello.
Se perfumaron y terminaron de alistar los últimos detalles.

-¿Están listas? – Dijo Ammy desde la otra línea del teléfono.
-Si... - miro a Victoria que se ponía un poco de brillo labial – Ya estamos listas.
-Bien, entonces en cinco minutos llegamos allá.
-Ok... las esperamos.

Pasaron los cinco minutos y Ammy le envió un mensaje a ________ avisándole que ya estaban abajo.
Tomaron sus chaquetas y bajaron.

Llegaron a la puerta de entrada del departamento.

-¡Adiós Don Emilio!
-¡Adiós! ¡Diviértase mucho y cuídese!
-Claro, adiós.

Emilio era un viejo amigo del padre de ________. Y además era el portero de aquel departamento.
La conocía de muchos años, y él fue quien le dio la idea a ________ para que se fuera a vivir a ese lugar.

Subieron al auto. Lo hicieron andar y se fueron a su destino, la disco.
Llegaron allá. La música sonaba a todo dar.

Caminaron entre toda la gente que se encontraba bailando.
Hasta que lograron llegar a la mesa de los tragos.

-Ok, esta vez yo invito.
-¿Tu Ammy?
-Si...
-¡Que bicho te pico! – bromeo ________.
-Ningún bicho – rió – solo que ahora si tengo dinero... y como es el cumpleaños de mi querida prima – sonrió - ¡Yo invito!
-¡Genial! – dijo Jessie (la prima) – entonces pidamos los mejores tragos.

Comenzaron a reír.

Ammy llamo al chico que prepara los tragos.

-Buenas noches – saludo él.
-Buenas noches – respondió Ammy.
-¿Qué van a querer las bellas damas?
-Eh... - pensó – aww... gracias por lo de bellas – sonrió.
-De nada, yo solo digo la verdad – guiño el ojo.
-Ok, no nos desviemos del tema – sonrió tímida – hoy es una noche especial, así que sorpréndenos con algún trago.
-Les preparare unos de mis favoritos, y el mas especial – sonrió – solo para ustedes.

Las chicas rieron.

Un par de movimientos con botellas y vasos, el chico les preparo un exquisito trago. Lo sirvió a cada una.
Le dieron las gracias al amigable y lindo chico, para luego encaminarse hasta la pista de baile.