La lluvia.

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Narra Toby

Era un día como otro cualquiera. Estaba en clase, absorto en mis pensamientos mientras caía una lluvia que parecía que iba a romper la ventanas. El sonido que hace es tan relajante... Me trae tanta paz. Levanto la mano para captar la atención de la profesora, con intención de que me deje salir al baño. Una vez la profesora me ve, pregunto, y al escuchar su respuesta, salgo de clase en dirección al baño, que está situado en la primera planta del edificio mientras que yo estoy en la cuarta.

Cuanto más bajo las escaleras, más fuerte y con más agresividad suena el sonido de las gotas golpeando el suelo, con una fuerza que no resulta normal escuchar. Extrañado, salí afuera por la puerta que estaba delante del baño de los chicos antes de ir. La lluvia parecía esconder algo en medio, como si en medio de la cancha del instituto hubiera una silueta de una cabaña.

Extrañado, decidí adentrarme en la lluvia dispuesto a investigar que era esa figura. La lluvia empezaba a tocar mí piel y no era nada suave, pero me estaba relajando sentir toda esa agua, tanto, que mi cuerpo empezó a moverse solo como por arte de magia. Intenté pararme, pero mis piernas no me respondían, era como si yo no estuviera moviendo mi propio cuerpo.

Al ver que estaba casi llegando a la cabaña que estaba en medio, empecé a tener miedo. Ya no se veía nada cuando miraba hacia atrás, solo una espesa niebla, acompañada de una lluvia que parecía no cesar. Intenté gritar, pero mí boca, al igual que el resto de mi cuerpo, no me reaccionaba. Una vez llegué al centro, había una cabaña envuelta por una burbuja donde no caía nada de lluvia. 

Ya era raro que hubiera una cabaña en medio de la cancha del instituto, pero que estuviera envuelta en una burbuja que ignoraba por completo la lluvia era incluso más extraño. Aún así, era el único sitio visible donde me podía refugiar, así que volví a intentar controlar mí cuerpo, esta vez con un resultado satisfactorio. Corrí y me tiré al suelo, quería escapar de la lluvia, la cual estaba dejando de relajarme y estaba comenzando a dañarme, ya que cada segundo que pasaba, la lluvia caía más fuerte. 

Ya dentro de la burbuja, el suelo por fuera parecía que podría quebrarse en cualquier momento. Me levanté y limpié mi ropa como pude. La cabaña parecía estar en un estado bastante viejo a pesar de que para mí, era completamente nueva. Me acerqué a la puerta y decidí dar unos toques.

Hola, ¿hay alguien? - pregunté mientras mí mano tocaba la puerta de madera. Esperé unos segundos, pero no obtuve respuesta.

Volví a tocar la puerta, para obtener el mismo resultado que antes. Decidí abrir la puerta ya que parecía no haber nadie. Para mí sorpresa, dentro parecía un lugar bastante acogedor, con una fogata encendida y un salón bastante habitable con sillones, sillas y mesas.

Entré y decidí explorar todo lo que veía sin meterme demasiado y sin tocar más cosas de las que eran necesarias.

Para mí sorpresa, alguien tocó la puerta. Temoroso, me acerqué a la misma y la abrí. Tras la puerta había un chico de unos 24 años, que estaba empapado por la lluvia.

Hola - dije en un tono inseguro - ¿quieres pasar?

Hola - respondió el chico intentando recobrar el aliento- ¿Qué haces tú aquí? ¿Qué es esta cabaña? ¿por qué la lluvia es tan intensa? - preguntó.

Ojalá supiera responderte a todo, yo estoy igual de confuso - respondí.

Genial, que útil - dijo irónicamente el chico.

Bueno, ¿vas a entrar o te vas a quedar ahí afuera? - respondí mientras sostenía la puerta para que no se cerrase.

El chico entró sin decir nada. No parece una persona muy simpática, aunque puede ser el shock del momento.

Me llamo Toby, encantado - dije extendiéndole la mano después de cerrar la puerta, la cual miró con cierta duda.

Yo soy Michael, aunque puedes llamarme Mike - dijo agarrando mi mano y estrechándola, para acto seguido ponerse a hacer el mismo recorrido que hice yo por la casa.

¿Cómo acabaste aquí? ¿también viste la caseta en la cancha y viniste a verla? - pregunté mientras me sentaba en uno de los sillones

Sí, me pasó lo mismo. Vi a alguien que juraría que era mi sobrino acercarse a la cabaña y se desvaneció aquí. Luego no sé, como que mi cuerpo se movió solo para entrar, fue bastante raro, casi como si me estuviera controlando otra persona - dijo mientras se quitaba la chaqueta y la ponía encima de una silla.

¿A tu sobrino? No he visto a nadie por aquí...He estado buscando por aquí y parece ser que soy la única persona aquí dentro - dije.

¿Enserio? Joder, estoy se va volviendo cada vez más raro por segundos... Es de locos esto, de verdad - dijo llevándose las manos a la cabeza - ¿por qué viniste tú a la cabaña? ¿tú también la viste?

Sí, me acerqué por curiosidad pero... mi cuerpo empezó a moverse solo también, fue muy raro - dije

Y como por arte de magia, la lluvia paró de forma repentina.

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