Treinta y tres

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Mía agarra el arma entre sus dos manos delicadas como una pluma y se apunta en la cabeza.
Se ubicaba en el pasillo donde siempre veía a Adrián cruzar con su grupo de amigos, que realmente ya no lo son demasiado al estar de noviazgo con ella.
Una lagrima se escurrió en su mejilla derecha. Todo estaba en silencio.

-Ya no dejare que me lastimen mas..- murmuro cabizbaja.
Otra u otra lagrima mas cayo, cuando estaba apunto de apretar el gatillo un grito hizo que Mía tirara el arma al suelo.
-¿¡Que demonios te pasa en esa cabeza!?- preguntó Adrián agarrando se el cabello.
-No quiero seguir existiendo Adrián- de nuevo agarro la arma y se apuntó justo en la frente.

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Oigan mis hermosos lectores/as son lo mejor que me ha pasado! <3
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En realidad se los agradezco muchisisisimo espero que pasen un lindo día/tarde/noche.

Voten y comenten. <3

Bye

Hola, Mía. /Editando/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora