Era viernes, justo un día antes del cumpleaños de Harry.
El tiempo climático ha mejorado en el transcurso de los días. Haciendo sorprendentemente que aparezca el sol a las primeras horas de la mañana. Pero eso no cambia el hecho de que el día transcurra con una brisa fría y húmeda.Hoy se haría la fiesta sorpresa para el rizado, que sería grande ya que habían invitado a los de su generación. Días atrás, en la preparatoria, Louis había estado hablando con Nilo y Zayn, apoyando un poco en la organización.
En estos momentos le entraba la duda sobre su regalo. ¿Sería algo adecuado para él?
Su mente lo traicionaba diciéndole que eso podría no gustarle al rizado. Pero por otro lado le decía que seguro le iba a encantar.—Tranquilo, o sino le harás un hoyo al carro.
Louis dirigió su vista al ojiverde para luego darse cuenta de que pisoteaba con la punta de sus vans el tapete del coche. Dejó de hacerlo.
En la mañana Louis le había enviado un mensaje a H para decirle que su carro había sufrido una ponchadura en una llanta trasera pidiéndole de favor que lo llevara al instituto. Claro, eso era mentira. Zayn le había dicho la noche anterior que estuviera junto a él lo que quedara del día, así cuando Zayn le marcara a Harry le preguntaría en dónde estaba y diría que con Louis.—Lo siento, sólo...nada.
—Estas nervioso, ¿pasa algo?
El semáforo dio luz roja haciéndolo parar por un momento.
—Nada.
Segundos después.
—¿Seguro?
—Bueno, es que-
El claxon de varios autos sonaron interrumpiendo al menor. Quien agradeció internamente, que si no fuera por eso, su boca no tendría censura y diría lo planeado para ese día. Decidió no decir más hasta llegar al edificio donde vivía.
Bajaron siendo azotados por el viento fresco que se llevaba hojas secas de árboles a su paso. El cielo siendo totalmente blanco. Una pequeña lluvia se había soltado hace tan sólo unas horas. Dejando algunos charcos esparcidos por las calles y haciendo lodo en la tierra.
—¿Tu madre está?
—Nope. Está en el trabajo.
Dio una media vuelta viendo a Harry en el sofá acariciando a Hades, mientras éste soltaba leves ronroneos.
—Harry.
—¿Mmm?
Se acercó parándose enfrente de él.
—Feliz cumpleaños adelantado.
El rizado sonrío de lado subiendo sus manos para colocarlas en la pequeña cintura de Louis.
—Bueno, gracias. Pero...
—¿Pero?
Sonrió el castaño arqueando las cejas.
—Alguien se te ha adelantado hoy.
—¿A sí?—ladeando la cabeza—¿Quién?